El presidente de Chile, el conservador Sebastián Piñera, defendió su plan de reapertura gradual de la economía para evitar que aumente el desempleo, pese a que este viernes se registró el mayor número de nuevos casos diarios de COVID-19 desde el inicio de la pandemia.
“Tenemos que volver a poner en marcha nuestra sociedad, porque si todos nos quedamos acuarentenados en nuestras casas vamos a tener una crisis social de desempleo, de quiebra, que va a producir un daño gigantesco a la calidad de vida”, dijo Piñera durante la conmemoración del Primero de Mayo.
El mandatario recordó que el nuevo coronavirus llevó el desempleo en el primer trimestre del año hasta el 8,2 %, lo que supone el peor registro en un década y un aumento del 1 % con respecto al mismo periodo de 2019.
“Sabemos que esa cifra toma solamente las dos últimas semanas de marzo y que la situación se ha ido agravando y, por tanto, es muy posible que la cifra de desempleo verdadera que tenemos hoy día sea mucho mayor”, alertó.
A diferencia de otros países de la región con menos casos como Argentina o Colombia, el Gobierno de Chile rechazó desde el inicio decretar el confinamiento nacional y cerrar totalmente la economía y optó por “cuarentenas selectivas y estratégicas”, con restricciones de movimiento que se imponen y se levantan semanalmente en cada comuna (barrio) o ciudad en función de los nuevos contagios.
El país, donde el primer caso de COVID-19 se detectó el 3 de marzo, sí se encuentra bajo estado de excepción, con toque de queda desde las 22.00 hora local, con colegios, universidades y fronteras cerradas, así como la mayoría de los comercios, aunque en los próximos días se espera la reapertura de algunos centros comerciales.
Foto: vía 800 Noticias