De acuerdo a una nota de prensa del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), a quince días de que se ejecutara la evacuación en el Internado Judicial de Los Llanos, mejor conocido como Cepella, aún hay personas que no saben dónde se encuentran sus familiares.
Los traslados finalizaron el pasado 16 de mayo en Guanare, estado Portuguesa, la población carcelaria fue distribuida en diversos recintos penitenciarios del territorio nacional.
Según las cifras en la página web del Ministerio de Servicio Penitenciario, 1.718 presos fueron trasladados a penales con régimen penitenciario y 380 a penales abiertos, para un total de 2.098 reclusos trasladados, además cinco reclusos fueron trasladados hasta un centro asistencial tras resultar heridos en la masacre de Cepella, hecho ocurrido el 1 de mayo y que culminó con 47 presos muertos y 75 lesionados.
Los presos de Cepella se comunicaron con el OVP para exponer que los reclusos no tuvieron la oportunidad de avisar a sus deudos sobre los traslados, por lo que éstos se han visto en la obligación de buscar la forma de revisar los listados que fueron publicados en la entrada principal de algunas cárceles.
“Muchos hemos podido saber que nuestros muchachos están en algún penal porque nos hemos apoyado en amigos de otros estados, pero es imposible trasladarnos para constatar esto por la cuarentena”, relató el familiar de un interno.
Otra de las personas que entrevistó el equipo de OVP relató que se ha sentido angustiada porque es del estado Mérida y cuando comenzó a buscar a su familiar le indicaban que lo habían trasladado a Carabobo, otros le decían que estaba en Lara.
La mayoría de los familiares no tienen conocimiento donde se encuentran los reclusos que fueron trasladados de Cepella y aunque a los presos les prometieron una llamada al llegar a cada penal, esta promesa no se ha hecho efectiva. Los únicos que se han podido comunicar son los que reclusos que ingresaron a recintos sin régimen penitenciario.
Los reos que llegaron a recintos con régimen penitenciario se encuentran aislados y, según lo aplicado por el Ministerio de Servicios Penitenciarios, son 45 días que estarán incomunicados.
Con información de OVP.