El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, adelantó este viernes que no asistirá a la investidura del peronista Alberto Fernández como presidente argentino, prevista para el próximo 10 de diciembre en Buenos Aires.
«No voy», declaró en forma tajante a periodistas Bolsonaro, quien durante la campaña para las elecciones en Argentina llegó a tildar al candidato del peronismo y ahora presidente electo de «bandido de izquierda».
Según reseña Unión Radio el líder de la ultraderecha brasileña, quien ya ha dicho que no pretende felicitar al presidente electo, consideró que Argentina está ahora «en una situación complicada», aunque aclaró que no se propone adoptar «ninguna represalia» contra el nuevo Gobierno, que tendrá como vicepresidenta a la exmandataria Cristina Fernández.
«Ya que ganó, vamos hacia adelante», apuntó, aunque subrayó a modo de queja que «el primer acto» del presidente electo fue «pedir la libertad» del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, gran antagonista político de Bolsonaro y en la cárcel desde abril de 2018, condenado a ocho años por corrupción.
Bolsonaro reiteró que su deseo es que el Gobierno de Fernández «tenga una relación con Brasil semejante» a la desarrollada con el presidente saliente, el conservador Mauricio Macri, con quien el líder brasileño mantuvo una cierta cercanía ideológica.