Desde 1988 la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asamblea General de las Naciones Unidas acordaron que el el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA se conmemora cada 1 de diciembre para aumentar la concienciación sobre el VIH/SIDA y mostrar apoyo a las personas que viven con esta enfermedad.
El 1 de diciembre fue elegido para maximizar el impacto mediático y sensibilizar al público en una época del año propicia para la reflexión y la solidaridad. Desde su instauración, esta jornada se ha consolidado como una plataforma global para movilizar recursos y fortalecer el apoyo hacia las personas afectadas por el VIH.
Este día busca educar al público sobre el VIH/SIDA, promoviendo la prevención y el acceso a tratamientos. La educación es clave para reducir la transmisión del virus y combatir el estigma asociado.
También es un día para honrar la memoria de las millones de personas que han fallecido a causa del SIDA y se muestra solidaridad con quienes viven con el VIH. El lazo rojo es un símbolo de apoyo y concienciación.
Además, se celebra el progreso en la investigación y el tratamiento del VIH/SIDA, al tiempo que se reconoce la necesidad de continuar los esfuerzos para erradicar la enfermedad. La ONU estableció la meta de poner fin a la epidemia de SIDA para 2030.
Este 2024, el lema de la campaña del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (Onusida) es «Sigamos el camino de los derechos para acabar con el SIDA», destacando la importancia de proteger los derechos humanos para avanzar en la lucha contra esta enfermedad.