AFP / Los ejércitos de Estados Unidos y Corea del Sur planean «suspender» los ejercicios militares anuales a gran escala, mientras el presidente Donald Trump se esfuerza en mejorar las relaciones con Corea del Norte, dijo un funcionario estadounidense el viernes.
El comentario del funcionario, que habló bajo condición de anonimato, se produjo poco después de la conclusión de la segunda cumbre de Trump con el líder norcoreano Kim Jong Un en Hanoi, que terminó sin un acuerdo formal pero con ambas partes sugiriendo que seguirán hablando, indicó la agencia de noticias.
NBC News informó por primera vez que los simulacros de Foal Eagle, que usualmente se realizan en la primavera boreal, serían eliminados, citando a dos funcionarios de la defensa de Estados Unidos que no se identificaron.
Foal Eagle es el mayor de los ejercicios regulares conjuntos realizados por estos aliados, y siempre ha enfurecido a Pyongyang, que lo condenó como preparativos para una invasión de su territorio.
En el pasado, ha involucrado a 200.000 soldados surcoreanos y unos 30.000 estadounidenses.
Desde la primera cumbre de Trump con Kim el año pasado en Singapur, Estados Unidos y Seúl han reducido o desechado varios ejercicios militares conjuntos, y los bombarderos estadounidenses ya no vuelan sobre Corea del Sur.
Trump se ha quejado repetidamente de que los ejercicios son demasiado costosos. La NBC informó que los ejercicios anuales serían reemplazados por «entrenamientos más pequeños y específicos para la misión».
Sin embargo, el presidente republicano ha descartado retirar cualquiera de los 28.500 militares estadounidenses basados en Corea del Sur para defenderla de su vecino.
Cualquier reducción de este tipo enfrentaría un fuerte rechazo del Congreso de Estados Unidos y de Japón, cuyo gobierno conservador desconfía profundamente de las intenciones de Corea del Norte.