Según reportó el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), un total de 103 mujeres que se encuentran recluidas en la Penitenciaría General de Venezuela (PGV) en San Juan de los Morros, estado Guárico tienen que cancelar una cuota para recibir los alimentos e insumos personales que le son enviados.
Según el informe de la OVP, los funcionarios del Ministerio de Servicios Penitenciarios cobran a los familiares para permitirles el ingreso de alimentos u otros paquetes, al parecer, la cuota sobrepasa los 10 dólares.
Los familiares aseguraron para la organización que la mayoría no tienen recursos para proveer a las mujeres detenidas y lo que les llevan es producto de un gran esfuerzo, todo esto aunado al gasto de transporte. Es por esta razón que trasladarse hasta la PGV se ha convertido en un calvario.
De la misma forma aseguraron que las privadas de libertad sufrieron por la escasez de alimentos, pues su dieta diaria estaba basada en bollos, arepa sin relleno o alguna verdura cocida. Tras varios reclamos, la directiva del anexo femenino ha tomado algunos recaudos para mejorar la situación, pero las reclusas temen que en cualquier momento vuelvan a lo mismo.
NC
Foto: Prensa OVP