El cuerpo sin vida de una niña de ocho años, de nacionalidad venezolana, apareció en una zona boscosa de la localidad colombiana de Girón.
La policía capturó al presunto responsable de su muerte, un hombre de 59 años de edad y del que se dijo es dueño de la vivienda donde la menor vivía con su madre.
El medio colombiano “Blurradio” informó que la pequeña Kerly Andreina Cuevas Materán había salido de su hogar en compañía de un niño vecino para jugar, pero no regresó en el resto del día.
La madre de la menor, identificada como Kelly Johana Materán Rivero, formuló la denuncia ante la línea 123, lo que desencadenó una enorme movilización por parte de las autoridades locales.
Las unidades de la Seccional de Protección y Servicios Especiales, el Grupo de Protección a la Infancia y Adolescencia, la policía judicial SIJIN, UBIC SEPRO y el GAULA, entre otros, desplegaron una búsqueda exhaustiva.
Alrededor de las 8:40 p.m. del mismo día, el cuerpo sin vida de la menor fue encontrado en una zona boscosa cerca de la estación de Metrolínea, en el municipio de Girón, por funcionarios del Ejército.
Gracias a imágenes de cámaras de seguridad, se logró identificar a un hombre con la niña desaparecida.
El sospechoso fue identificado como Alirio Gualdrón Rojas, de 59 años de edad, oriundo de Aratoca, y residente en la misma vivienda que la menor.
Tras ser requerido, Gualdrón Rojas fue plenamente identificado y puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación.
Sin embargo, la búsqueda de la niña continuó, con la participación de diversas unidades policiales, el Ejército Nacional, los bomberos del municipio y la colaboración de la comunidad, hasta que fue finalmente localizado su cuerpecito sin vida en el lugar antes indicado.
Las autoridades locales han expresado su compromiso con esclarecer completamente este lamentable suceso, y llevar ante la justicia al responsable.
Fuente: Cactus 24