Los educadores venezolanos tenemos prohibido rendirnos, y ya ni miedo tenemos, porque no tenemos ya nada qué perder, pues todo lo perdimos, y hasta la dignidad la perdimos a mano este gobierno.
La anterior manifestación provino de la profesora Liliana Yépez, presidenta encargada del Sindicato Unitario de Trabajadores de la Educación del Estado Lara (Sutelara), en declaraciones que ofreciera durante la concentración de educadores efectuada en la mañana de este lunes 2 de octubre, en la carrera 18 con la calle 25, frente a la Zona Educativa del Estado Lara, en Barquisimeto.
Había allí docentes afiliados, por un lado, a Sutelara, pero también a los siguientes gremios: Sindicato Único del Magisterio del Estado Lara (Sumalara), Sindicato Venezolano de Maestros del Estado Lara (Sinvemal); Federación Nacional de Trabajadores de la Educación de Venezuela, Seccional Lara (Fenatev-Lara), y Colegio de Técnicos y Peritos del Estado Lara.
Ante una pregunta, reiteró que, en este día lunes 2 de octubre, los educadores estuvieron convocados a asistir a la citada concentración, pero que, este martes y miércoles, asistirán a sus planteles educativos, para efectuar labores administrativas, pero también gremiales, en el sentido de revisar cada instalación escolar, y levantar el informe respectivo para la dirección gremial, “porque, hasta donde tenemos conocimiento, no menos del 60 por ciento de las plantas físicas de nuestras escuelas públicas están deterioradas”.
Y jueves y viernes, se mantendrán contactos y consultas con delegados d centros de trabajo en todo el Estado Lara.
Amenazas continuas
Asimismo, denunció “la continuidad” de las amenazas de la ministra de Educación, Yelitza Santaella, para tratar de amedrentar a los educadores y al movimiento sindical del magisterio venezolano.
–Claro –recalcó–, para ella es muy fácil llamar a clases presenciales porque a ella no le alta nada, y siempre tiene la nevera llena, y, obviamente, no tiene ni noción de lo que es pasar necesidades, como las estamos pasando la inmensa mayoría de los educadores en Venezuela.
También denunció que, el pasado año, la misma ministra dijo públicamente que se iba a aceptar el llamado “horario mosaico”, es decir, que los educadores podían ir nada más dos o tres días a clases, de manera que, en los dais restantes, pudieran desempeñar otra actividad que generase sustento para el hogar.
–Pero ahora viene a decir que investigarán a los docentes por ésta y por varias otras cosas más.
–Entonces, yo le digo a la ministra: Está bien que investiguen lo que quieran, pero le pregunto entonces: ¿Por qué no investigan a los que han desangrado al país durante estos últimos años, y que ahora se dan la gran vida con la plata de los venezolanos?
Sentencia judicial
Por su parte, el profesor Orlando Herrera, de Sumalara, mostró públicamente un documento que, según él, contenía el texto de una sentencia emitida en el año 2022 por una jueza de Sustanciación y Control de Primera Instancia del Estado Lara.
En dicha sentencia, a raíz una acción intentada contra los educado dores, se establece “que es el Estado, y no nosotros los educadores, el que debe garantizar las condiciones mínimas para que esa educación se desarrolle de la mejor manera posible.
–Y en tal decisión –añadió–, la referida jueza dijo que el Estado debía, entre otras cosas, garantizar los recursos para el buen funcionamiento de las instalaciones escolares, con sus dotaciones suficientes, así como también garantizar a los educadores unos ingresos mínimos para llevar una vida decente.
¿Y qué ha hecho el gobierno? Pues sencillamente lo que ha hecho siempre: Hacer caso omiso de esta sentencia, y escurrir el bulto para con sus obligaciones y ejecutorias, puies,. Pñor cierto, dicha sneenia incluso está firmada y aceptada por las máximas autoridades educativas el Estado Lara, valga decir los profesores Nixon Arrieche y Eliamer Elkatrib.
Gráficas: Julio Colmenárez