Crisis en las telecomunicaciones venezolanas | Por: Freddy Torrealba Z. < El Informador Venezuela
Close

Crisis en las telecomunicaciones venezolanas | Por: Freddy Torrealba Z.

Freddy Torrealba

La imagen en el mundo del sector de las telecomunicaciones venezolanas, es pésima por el abandono a que lo ha sometido el gobierno de turno. Un estudio de la BBC reveló que el mismo es de los mas deficientes de América latina junto a países como Haití y Cuba sumidos en el más pavoroso subdesarrollo.

Las telecomunicaciones están hoy profundamente ligadas al desarrollo de los pueblos, como ocurre en África donde se usa la radiodifusión en labores educativas. Los chinos la emplearon en sus campañas de alfabetización del campesinado. El sector se ha ampliado con las nuevas tecnologías digitales para el almacenamiento y transmisión de mensajes e información. De esa forma ha asumido la denominación de telemática e informática. Estas tecnologías comprenden la computación, rayo láser, fibra óptica y satélite utilizadas en diversos dispositivos.

En Venezuela ya son frecuentes las irregularidades en la prestación, por ejemplo, de los servicios de internet y telefonía móvil y fija, lo cual afecta la variedad de actividades de los usuarios. Una muestra es la página web del Banco Bicentenario, un verdadero monumento a la ineficiencia con pérdida de tiempo para los sufridos clientes, entre estos los educadores. También la fuga de personal capacitado de CANTV el cual no es reemplazado. Agreguemos además la baja inversión del Estado que niega las divisas al sector privado. La recuperación de la telefonía se ha tornado más costosa por no invertir oportunamente el actual gobierno cuando la bonanza petrolera.

Así pues, desde la penúltima semana del pasado mes de octubre se hizo evidente esta irregular situación anunciada a comienzos de año por el especialista en telecomunicaciones Fran Monroy. De acuerdo con el experto no se vislumbra una solución al grave problema que podría conllevar al colapso del sector. Monroy atribuye el problema a la falta de inversión. mantenimiento, personal capacitado y actualización en el mismo. Es más, hace una negativa prognosis sobre su desenlace en el futuro inmediato nada alentador. Un negativo escenario agravado tras el apagón de marzo pasado.

En las comunicaciones digitales de hoy es clave la potencia y velocidad con que se desarrolle el proceso. Lo establecido universalmente es de al menos 80 bits por segundo. En Venezuela apenas son usados 2 bits por debajo de Bolivia que cumple con la normativa. Ello pese a que el país dispone de un avanzado servicio de satélite como lo es el Simón Bolívar de fabricación china inaugurado en 2008 por el expresidente Hugo Chávez. El satélite cubre el continente americano de norte a sur. Por lo que resulta inexplicable la crisis reiterada en este sector terciario de la economía.

Pero es sabido que gran parte de esa energía es destinada a Cuba por cable, las transmisiones de los canales de televisión TELESUR y el ruso RT afectos ideológicos al régimen. También labores militares y de espionaje y el Estado que se reserva una buena cuota para su beneficio. En los últimos días se ha venido a pique el servicio telefónico prestado por la operadora estatal Movilnet. NetBlocks ha reportado la caída del servicio de internet por ABA Cantv en al menos cinco estados. Lo llamativo es que éste es el mayor proveedor estatal de internet en el país.

Las desastrosas consecuencias las paga la ciudadanía por un pésimo servicio a manera de impuesto entre estos el IVA que inexplicablemente se mantienen en un país petrolero. Además, los más afectados son quienes no tienen acceso a tecnologías más avanzadas por lo costoso.

En el problema para nada existe la casualidad sino más bien la acometida de un plan de aniquilamiento de las áreas productivas de la economía del país en que persiste el régimen. Se trata de un maléfico y deliberado plan para incomunicar, aislar, paralizar, manipular y someter a la población. Una forma de control sociopolítico de inspiración totalitaria, Todo fríamente calculado en el propósito de negar el derecho humano a la comunicación. Una opresiva situación que neurotiza a los sufridos usuarios de este servicio. Lo paradójico es que se tiene que pagar por un servicio que a veces no se recibe.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

0 Comments
Abrir chat
Comunícate con nosotros
Comunícate con nosotros
scroll to top
SiteLock