El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, luego fe tantos dimes y diretes, respaldará la juramentación de Nicolás Maduro este 10 de enero, enviando a su embajadora en Caracas, Gilvania Oliveira, al acto, en representación del gobierno brasilero.
Fuentes del Ministerio de Relaciones Exteriores brasileño confirmaron al diario “O Globo” que ya está confirmada la asistencia de la diplomática, de manera que se descarta la visita oficial de Lula o de algún alto representante.
Brasil ha sido uno de los países que, desde julio pasado, habían insistido en el no reconocimiento de ningún triunfador en las elecciones presidenciales de Venezuela hasta que no fuesen expuestas las actas de escrutinio.
El último “roce” de ambos países ocurrió en octubre 2024, en la cumbre de los Brics, cuando el país amazónico vetó la entrada de Maduro al grupo, y esto fue duramente rechazado por el mandatario socialista.
Relaciones reducidas
El ministro de Exteriores brasileño, Mauro Vieira, ha asegurado recientemente que, pese a que “las circunstancias impongan una inevitable reducción de las relaciones”, no hay intención alguna de romper vínculos diplomáticos con Venezuela.
Vieira reconoció que el vínculo se tensó en los últimos meses, y que la relación atraviesa por un “momento delicado”, pero resaltó que es crucial mantener la “diplomacia, el profesionalismo y la cautela”.
“El momento actual exige diálogo. Negociación y no aislamiento son claves para una solución pacífica de la crisis en Venezuela”, explicó.
Inclusive, apuntó que “Brasil tiene como práctica reconocer Estados y no gobiernos”, como parte de “una tradición que busca evitar la polarización del reconocimiento o no de un gobierno extranjero”.
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG