El Ministerio de Medioambiente de Sudáfrica informó este 01-Feb que las muertes de rinocerontes por la caza furtiva en el país, disminuyó un 33,7% durante el 2020 y desde que inició la pandemia de la Covid-19.
Detalló que durante el 2019, lamentaron la pérdida de 592 ejemplares, mientras que en el 2020 contabilizaron 394 rinocerontes muertos a causa de la caza furtiva.
Indicó que la notable reducción se debe, en gran medida, a las «circunstancias extraordinarias» impuestas por la pandemia de covid-19, según detalló hoy el Ministerio en un comunicado.
Las restricciones a la movilidad para combatir la expansión del coronavirus limitaron también el acceso y los desplazamientos de los furtivos, que persiguen a esta especie gravemente amenazada por sus cuernos.
«Combatir los crímenes de la fauna es duro, peligroso y amenazador para la propia vida, y adoptar una acción unificada muestra que la batalla contra la caza furtiva de rinocerontes se puede ganar», resaltó Neil Greenwood, director regional de IFAW, tras la publicación de los datos sudafricanos.
La mayor parte de los ejemplares muertos (245, un 62 % del total de las bajas del país) se dieron, como es habitual, en el parque nacional Kruger (noreste), una de las mayores reservas naturales de África y hogar de la mayor parte de la población sudafricana de rinocerontes.
Naikarys Cordero
Foto: Getty Images