Anderson Piña Pereira- José Remigio es tocuyano y docente de la escuela de música de niños especiales en el municipio Morán, tanto él, como al igual que un poco más de 200 pacientes se encuentran a la espera de un milagro, para poder usar los quirófanos del Hospital Egidio Montesinos, que hasta la fecha se le ha sido negado por parte de las autoridades municipales y regionales.
Remigio cuenta a EL INFORMADOR que en la actualidad padece de una hernia inguinal, que en los últimos días le ha impedido dar sus clases, debido al constante dolor que sufre en la parte baja de su espalda.
Pero en medio de su malestar físico, relata que la única ayuda que ha recibido hasta el momento es la de los Hijos de Morán, por eso lo único que le piden a la directora del hospital, y la alcaldesa Gisela Rodríguez es que le permitan usar los quirófanos los días 9, 10 y 11, para así beneficiar a quienes necesitan ser intervenidos.
Ester Consuelo Mendoza, quien también es afectada, sostiene que en reiteradas oportunidades han llevado cartas a la alcaldesa y la gobernadora, donde hasta la fecha no han recibido ningún tipo de respuestas para poder usar las instalaciones del hospital.
Sin embargo, Mendoza cuenta que tras una visita al centro de salud, la subdirectora les argumenta que para los días que ellos solicitaban las instalaciones, ya se había programado una jornada de esterilización.
“Nosotros estamos dispuestos a posponer las intervenciones, para los días pautados, (…), pero que entonces nos permitan hacer la intervención la otra semana”.
Iris Báez también ha podido recibir la ayuda de los Hijos de Morán, ella al igual que los otros pacientes, señala que no cuenta con los ingresos para poder realizarse las operaciones en un centro de salud privado, y mucho menos para poder comprar los medicamentos.
Báez padece de una hernia inguinal bilateral, su única petición es que los ayuden con la cooperación de los quirófanos.
Precisó que hace 15 días fue averiguar el precio de la lista de los medicamentos que le pidieron, pero sus ingresos como costurera no le permiten adquirir esos insumos.
“De las cosas que me mandaron sólo pude averiguar estos precios, la hojilla número 20, estaba en Bs. 4.000, los cubre-botas en 2.000, los analgésicos en 14.000, el propanol y demerol en 98.000, antibióticos 7.000 y la malla en algunos lugares está en 60 dólares, que equivale a 720.000 bolívares”.