El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva dijo el miércoles que está a favor de que más países se incorporen al grupo BRICS para naciones en vías de desarrollo, que actualmente está formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
El grupo llevará a cabo una cumbre en Johannesburgo del 22 al 24 de agosto. La reunión tendrá a la mano una lista de otras naciones que buscan incorporarse al grupo.
“Probablemente, en esta reunión, podamos decidir consensualmente qué países pueden unirse al BRICS”, comentó Lula a los periodistas en la capital Brasilia. “Soy de la opinión de que cuántos países quieran ingresar, si cumplen con las reglas que estamos estableciendo, aceptaremos su entrada”.
Los comentarios de Lula se produjeron horas después de que Reuters reportó que Brasil se había negado a aceptar nuevos miembros al grupo. Publicó declaraciones de diplomáticos brasileños no identificados, que expresaron inquietudes en torno a que incorporar más países al grupo podría disminuir la influencia de los miembros actuales.
Alrededor de 20 países han solicitado formalmente incorporarse al bloque, dijo Mauro Vieira, ministro de Asuntos Exteriores de Brasil, luego de la sesión de Lula con los periodistas. Señaló que entre ellos están: Argentina, los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Indonesia, Irán y Venezuela.
Vieira comentó que todos los miembros del BRICS están interesados en hacer un esfuerzo para aceptar la incorporación de otros países, pero que aún se deben discutir los parámetros para su entrada y que debe de haber un acuerdo mutuo entre los dirigentes.
La cumbre en Johannesburgo se llevará a cabo mientras China y Rusia, que enfrentan un aislamiento por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, buscan ampliar su influencia económica en los países en vías de desarrollo. El presidente ruso Vladímir Putin participará en la cumbre a través de videollamadas, mientras que se prevé que los demás jefes de Estado acudan en persona.
Desde que asumió el cargo, Lula se ha opuesto en varias ocasiones a la existente estructura internacional dominada por países de Occidente.
Ha rechazado la posición de Estados Unidos y de la UE de apoyar a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa, se ha negado a proporcionar armas a las fuerzas ucranianas y ha presionado para que se entablen negociaciones de paz para poner fin a la guerra.
Lula ha pedido que se ponga fin al dominio del dólar estadounidense en el comercio internacional y ha respaldado que haya una moneda común para el comercio dentro del bloque sudamericano Mercosur y para el comercio entre las naciones miembro del BRICS. También ha arremetido contra el Fondo Monetario Internacional.
Lula reiteró todas esas posturas el miércoles.
“¿Por qué Brasil necesita el dólar para hacer negocios con China o Argentina? Podemos comerciar en nuestra propia moneda”, comentó.
A continuación, elogió las perspectivas del Nuevo Banco de Desarrollo, respaldado por China y conocido comúnmente como el banco del BRICS, que financia proyectos de infraestructura en Brasil y otros países en vías de desarrollo.
“El banco del BRICS debe ser eficaz y más generoso que el FMI. Es decir, el banco existe para ayudar a salvar países y no para ayudar a hundir países, que es lo que hace muchas veces el FMI”, afirmó.
Lula también lanzó críticas contra el Consejo de Seguridad de la ONU y señaló que sus miembros han sido responsables de iniciar guerras pese a la misión del órgano de mantener la paz y la seguridad. Brasil ha buscado un puesto permanente en el consejo durante décadas.
AP