Decir que vas a conectar un grand slam es una cosa. Decir que vas a conectar un grand slam cuando las bases están limpias es otra.
Suma eso a la creciente leyenda del novato de los Cerveceros, el venezolano Jackson Chourio, para quien nada parece imposible en estos días.
“Una locura”, dijo el abridor veterano de los Cerveceros, el dominicano Francelis “Frankie” Montás. “Increíble”.
Montás y otros compañeros de Chourio en los Cerveceros juran que la siguiente historia es cierta. Mientras los Cerveceros salían del terreno en la mitad del sexto episodio en la victoria del lunes por 9-3 sobre los Cardenales, Chourio se acercó a Montás y a otros en el dugout.
“Voy a tomar un turno al bate con las bases llenas”, dijo Chourio, “y voy a dar un grand slam.”
Cuando se le preguntó sobre eso más tarde, Chourio respondió: “Creo que sólo estaba bromeando con ellos”.
Pero eso fue exactamente lo que hizo. Rhys Hoskins recibió una base por bolas, Sal Frelick conectó un doble y Joey Ortiz negoció otro boleto antes de que Brice Turang entregara el primer out. Eso mantuvo las bases llenas para Chourio, quien depositó un slider del relevista de los Cardenales, Riley O’Brien, en las gradas del jardín izquierdo para su 18vo jonrón de la temporada y el segundo grand slam en su carrera.
Ocho jugadores han conectado múltiples grand slams en las Grandes Ligas antes de cumplir 21 años, incluyendo a Ted Williams, Mickey Mantle, Alex Rodríguez y Chourio. No está claro si alguno de los otros predijo alguno de esos grand slams antes de que un solo corredor estuviera en base.
“Fue increíble”, contó Adames. “Por eso me estaba señalando a mí y a Frankie. Estábamos hablando de eso y él dijo, ‘Voy a dar uno’. Y lo hizo. Yo estaba como, ‘Oh Dios mío, realmente lo hizo’.
“Le está demostrando al mundo que tiene material de superestrella”.
El dominicano Freddy Peralta, quien abrió el lunes por los Cerveceros, agregó que Chourio le hizo nuevamente una pregunta que se ha vuelto parte de una rutina entre los dos.
“Me volvió a decir, ‘¿Ves lo bueno que soy?’”, reveló Peralta.
Y cada vez que la escucha, Peralta sólo se ríe.
“Yo sólo le digo, ‘Sí, yo sé que eres buenísimo’”, añadió Peralta.
Firmado con una extensión de ocho años y US$82 millones en diciembre, que representó un récord para un jugador sin ningún día de experencia en las Grandes Ligas, Chourio entró en un bache ofensivo tan fuerte en mayo que fue necesaria una especie de intervención por parte de Adames, Peralta y el también venezolano William Contreras para levantarle el ánimo.
Desde principios de junio, Chourio ha sido un jugador diferente. Tiene una línea ofensiva de .320/.374/.544 desde el 2 de junio, con 13 cuadrangulares y 13 bases robadas, lo que lo llevó a superar las 20 robos este año y darle un total de 18 bambinazos. Con dos más, sería el tercer jugador en la historia de las L.A./L.N. (junto con Vada Pinson y Mike Trout) en tener una campaña 20-20 en su temporada de 20 años, y el primero en hacerlo antes de cumplir los 21 años, ya que Chourio no cumplirá 21 hasta marzo del próximo año.
“Vaya, está en ese punto perfecto”, comentó el mánager de los Cerveceros, Pat Murphy. “Tiene la cantidad justa de sonrisa y la cantidad justa de intensidad, la cantidad justa de enfoque. Parece que nació para hacer esto”.
Pat Murphy sobre el grand slam de Chourio
Murphy no quería que pasara desapercibido que Chourio también recibió tres bases por bolas y se preguntó cuántos jugadores de 20 años o menos han negociado tres boletos y conectado un grand slam en un partido de Grandes Ligas.
“Apuesto a que son menos de 20”, aseguró Murphy
¿Qué tal cero? Antes de Chourio, en apenas seis ocasiones desde 1901 un jugador había recibido al menos tres bases por bolas y conectado un jonrón en un encuentro antes de cumplir 21 años. Ninguno de esos jonrones fue un grand slam. El último en hacerlo fue el jardinero de los Senadores de Washington, Jeff Burroughs, en 1971. ¿Antes de eso? El tercera base de los Medias Blancas, Bob Kennedy, en 1940.
“El muchacho está en el decibel correcto, o en la frecuencia correcta, lo que sea”, siguió Murphy.
Afortunadamente, la historia de Chourio en el 2024 no llegó a su fin el viernes en Cincinnati. En el primer partido de la barrida en la doble cartelera de los Cerveceros sobre los Rojos, Chourio pisó la primera base y se torció gravemente el tobillo derecho. Necesitó la ayuda de dos trainers de Milwaukee para regresar al dugout. Murphy pensó por un momento que la temporada de Chourio había terminado.
Pero a los pocos minutos, Chourio corrió de regreso al jardín izquierdo.
“Tenemos un nuevo apodo para él. Ahora es un jugador de fútbol”, dijo Adames.
Chourio está dispuesto a aceptar las bromas amistosas, ya que significa que puede seguir bateando.
“Es algo simplemente increíble”, dijo Chourio. “Es fantástico”.
Adam McCalvy cubre a los Cerveceros para MLB.com
LA/MLB
Foto: MLB