Un grupo de obreros educacionales del Estado Lara se congregó en la mañana de este martes 3 de diciembre frente al Edificio Buría, ubicado en la carrera 18 con la calle 25 de Barquisimeto, sede de la Zona Educativa de esta entidad federal.
El objetivo de dicha concentración fue el de reclamar el pago de las prestaciones sociales de alrededor de 1.500 obreros larenses que fueron jubilados en el mes de junio pasado, sin que, hasta ahora, se les hayan cancelado lo que les corresponde por concepto de prestaciones sociales.
Lo anterior fue expresado por Naudy Torres, presidente del Sindicato de Obreros de Institutos Educacionales del Estado Lara (SOIE-Lara), quien se encontraba allí presente.
Puntualizó Torres que, en la fecha antes indicada, el Ministerio de Educación decidió, por vía ejecutiva, la jubilación de entre 45.000 y 50.000 trabajadores de ese despacho en todo el país, en los que se incluyeron, aparte de obreros educacionales, también educadores y empleados administrativos.
Molestia
Ante una pregunta, manifestó el dirigente que han sido dos los detalles que más han molestado con relación a dicha medida.
–En primer lugar, que ninguno de esos trabajadores solicitó la jubilación, y, en segundo lugar, hay que preguntarse que por qué diablos los jubilaron, si no tenían recursos para cancelarles sus prestaciones sociales.
-Eso no puede calificarse sino de una enorme irresponsabilidad.
A manera informativa, recordó Torres que ahora no hay trabajadores estadales en el sector educativo en ninguna parte del país, ya que el gobierno nacional así lo dispuso.
–Es decir, que, del sector educativo, tanto los docentes como los trabajadores administrativos y los obreros que pertenecían a los estados o a los municipios, desde el año 2023, pasaron todos a formar parte de la nómina del Ministerio del Poder Popular para la Educación.
Con bastante molestia, Torres quiso resaltar el hecho de que, ahora, esos obreros jubilados solamente cuentan con el ingreso de la jubilación mensual, que no llega a cuatro dólares, y con la denominada cesta ticket, que tampoco es mucho.
Milagros
–Entonces, hay que imaginar –recalcó— todos los milagros que debe hacer, por ejemplo, uno de esos compañeros jubilados para poder sobrevivir, y, lo más preocupante, para mantener a su familia, pues todavía hay muchos de ellos que tienen hijos y esposa bajo su responsabilidad.
¿Los atendió alguien de la Zona Educativa?
–Bueno, sí. Nos atendieron el profesor Eliamer El Katrib, jefe de la Zona Educativa, y el ingeniero Wilfredo Rodríguez, jefe de Personal, quienes nos informaron que están a la espera de los recursos provenientes de Caracas, que esperan lleguen la próxima semana, y que, una vez que tales recursos estén aquí, se les hará efectivo el pago correspondiente a todos esos jubilados a los que el Ministerio de Educación les adeuda el monto de sus prestaciones sociales.
Advirtió Torres que, “de todas maneras, vamos a estar pendientes ante esa respuesta, para que las promesas no se queden solamente en las palabras”.
Llamado
Quiso finalmente Torres hacer un llamado al mismo profesor El Katrib, en los siguientes términos:
–Le recuerdo lo recientemente ocurrido en la Escuela Volcancito, de Sanare, en donde se produjo una contaminación colectiva que afectó a muchos miembros de
la comunidad escolar, entre ellos nuestra delegada laboral, quien se halla recluida en el Hospital de Sanare, la capital del Municipio “Andrés Eloy Blanco”,
–En ese sentido, le recuerdo asimismo al profesor El Katrib que lo ocurrido fue sencillamente un accidente laboral, por lo cual el despacho a su cargo está en la obligación de prestarle la mayor asistencia médica posible, porque su condición de salud así lo requiere.
Gráfica: Cortesía
RG