Hoy martes 4 de febrero, se cumplen 28 años de la intentona golpista del 4 de febrero de 1992, una intentona que fuese encabezada por el entonces teniente coronel del ejército venezolano Hugo Chávez Frías.
Se trata de una fecha que, a la postre, partiría en dos la historia republicana del país, por cuanto tal acontecimiento abrió las compuertas para que, a partir de enero de 1999, se instaurara en el país un gobierno encabezado por el propio Chávez, triunfador en las elecciones de diciembre del año anterior, que ha venido instaurando poco a poco un sistema económico y político totalmente distinto a todo lo vivido por el país desde su independencia, en 1821.
El frustrado alzamiento de Chávez Frías estaba destinado a derrocar al gobierno legítimo y constitucional del entonces presidente, Carlos Andrés Pérez.
Sin embargo, diversas circunstancias, tanto en lo militar como en lo civil, hicieron fracasar tal pretensión.
Esta intentona, hay que recordarlo, sorprendió a prácticamente todo el mundo en Venezuela, pues se creía que algo como eso había sido ya superado en el país –y realmente así había sido- desde hacía más de tres décadas.
Y ahí fue justamente en donde estuvo una de sus fallas, pues la fracasada militarada no contó con apoyo civil de ningún tipo, entre otras cosas porque los civiles, en su inmensa mayoría, realmente no tenían conocimiento de que eso se estaba fraguando.
En lo militar, si bien varias de las principales plazas del interior del país fueron tomadas por los insurrectos, también ocurrió que la intentona no tuvo el mismo éxito en Caracas, de lo cual, precisamente, el encargado era el propio cabecilla la insurrección.
En todo caso, lo cierto es que la intentona fue sometida y sus principales cabecillas sometidos a prisión.
Lo demás, por ser todavía un hecho reciente, es historia bastante conocido.
Pero, en todo caso, este nuevo aniversario del4 de febrero de 1.992 sirve para poner sobre el tapete la pregunta acerca de hacia dónde vamos y cuál es el futuro de Venezuela.
Reinaldo Gómez