LA FOTO DEL TIEMPO: José Miguel Mendoza, Nildo Echegaray, Ramón Aníbal Herrera(+), Teodoro Pérez (+) y Dr. Marcos Vásquez (+), posando frente al Templo Matríz “Nstra. Sra. de Altagracia de Quíbor.
A 121 años del nacimiento de la Sra. María Prudencia Peralta de Hernández, primera dama odontólogo en Quíbor. Biografía impresa en el Libro “Forjadores de Rumbos en Quíbor” 100 Biografías, autor Prof. Neptalí Mendoza Alvarado.
SRA. MARÍA PRUDENCIA PERALTA DE HERNÁNDEZ:
Nació en Quíbor el 28 de abril de 1900, hija de Petronila Peralta, Molina, y de Rafael López Roa, quien un día se la llevó a Ramón Hernández Urdaneta para que le extrajera una muela, quedando deslumbrado por su belleza, hasta que contrajeron matrimonio, del cual brotaron: Ida Rosa, María Esperanza (Odontólogo), Bárbara Edita (Médico), Gracia Cristina(Técnico en Investigación con Microscopio Electrónico), Belén Pastora (Educadora), Alba Marina y Eiber Timoshenko (Ingeniero Civil y Profesor de Matemática y Física). Los esfuerzos aspiraciones de Doña María, se centraron en la superación de la mujer Quíboreña, quienes para la época tenían solo la posibilidad de estudiar hasta el 4° Grado en la Escuela de Niñas “Mateo Liscano Torres”, cuando sus hijas Ida Rosa y María Esperanza terminan el 4° grado, ella junto a Misia Juanita de Armas (Directora de la Escuela) y Don Adelmo Ceballos plantean a la Presidencia del estado Lara, la necesidad de crear el 5° y 6° grado en la Escuela de Niñas. Logrando que los cursaran pero en la Escuela “Jiménez”. Allí terminaron la Primaria junto a, entre otras: Gloria Ceballos, Estela Cortés y Mercedes Pérez. Una vez egresadas sus hijas de Educación Primaria, Doña María convence a Don Ramón, para continúen estudios en el Liceo “Lisandro Alvarado” de Barquisimeto, nada fácil por su cuidadoso celo con sus niñas y porque alejarse del hogar para trasladarse a Barquisimeto, era un viaje de hasta 3 horas, soportando un enorme polvorín, contrataron a Rafael Arce para el transporte y así se fueron a estudiar, retornando solamente en diciembre a un ambiente de alegría, fiestas, paseos y serenatas, pero valió la pena al concluir el bachillerato, Doña María muy inteligentemente logra el apoyo de Don Ramón y las envía a la Universidad Central de Caracas a estudiar: María Esperanza , motivada por el trabajo de su papá y Bárbara se gradúa primero en Odontología. Doña María cumplió con un sueño, significó una gran fiesta colectiva, era la primera doctora en Odontología de Quíbor. Bárbara Edita también obtiene el Título de Doctora en Medicina. Como apreciamos Doña María marcó la época, abriendo la brecha para los padres enviaran a sus hijos a Barquisimeto y más allá a seguir los estudios. Doña María fue una mujer dotada por Dios de una belleza integral, desde lo físico a su interior, aflorando su rostro a través de su dulce sonrisa, irradiaba amor, su trato siempre delicado, respetuoso, cariñoso, no solamente sacó a su familia adelante, sino que ayudaba a quien lo necesitase, ya fuera alentándole con una palabra de aliento, aconsejando, atender a los enfermos o como parturienta, jamás dijo “no puedo”, siempre estuvo allí Donde la necesitaran. Cuando la dictadura de Pérez Jiménez ayudó a los presos políticos, colaborando con medicinas y recibiéndolos en su casa en Caracas, con mucho cariño, entre otros a Dory Parra de Orellana. Su coraje lo manifestó cuando Don Ramón, por motivos de salud, tuvo que permanecer varios meses en Caracas, ella se encargó de continuar el trabajo de él, saliendo airosa sosteniendo a su familia. Doña María mi inolvidable madrina, después de una vida ejemplar, falleció en Caracas, a los 55 años de edad, el 10 de enero de 1956. Poco después Don Ramón también muere en Caracas el 19 de diciembre de 1956, sin embargo aún viven en el recuerdo y el cariño de quienes tuvimos la fortuna de estar cerca de ellos.Para algún aporte o información favor comunicarse a través del correo [email protected].