91% del ingreso económico del trabajador no tiene incidencia en prestaciones sociales: Apucla < El Informador Venezuela
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91% del ingreso económico del trabajador no tiene incidencia en prestaciones sociales: Apucla

Dinero

Foto: referencial @elinformadorve

Al ajustar la  «cestaticket» a 40$ y disminuir el «bono de guerra» a $30, 91% del ingreso económico mínimo es por bonificación, lo cual no afecta el pasivo laboral, denunció la presidenta del Apucla, Déborah Velásquez de Valecillos.

Los trabajadores universitarios, en especial los profesores, no devengan un salario digno. En tal sentido solicitó que sea revisada esa decisión. Esta situación no es distinta en los demás sectores de administración pública, según sindicatos.

Al respecto,  El Informador Venezuela consultó al  vicepresidente del Colegio de Economistas del estado Lara, Miguel Rojas, quien sostuvo que  no aumentarse el salario mínimo las prestaciones sociales  están  “sentenciadas a su pérdida”.

Según él, una de la trabas para no aumentar el sueldo mínimo este 1 de mayor  fue la Ley Orgánica del Trabajo que contempla  la retroactividad de las prestaciones, y un  aumento “sustancial” del salario automáticamente elevaría su costo.

La LOTT está frenando el incremento de los salarios tanto en el sector Público como en el  privado”. Si el sueldo se eleva a 200 dólares ni el Estado ni la empresa privada soportaría ese costo.

En cambio eliminando la retroactividad  se pudiese dinamizar los sueldos y salarios y crear  fondos de pensiones que le permitan a la gente crear su propia pensión. Eso, además estimularía la economía, explicó.

Sin embargo, la inflación es una variable muy marcada en la economía venezolana  – inquirimos-“Sí, lamentablemente el aumento del salario sigue siendo inflacionario al no aplicarse otro tipo de políticas económica”,  respondió.

En ese contexto, expresó que la inflación se combate con más producción y por consiguiente se mejora la productividad y los sueldos. Por tanto, lo primero que debe hacer es incentivar el aparato productivo.

Pero además, debe haber algunos subsidios para el sector productivo, de tal manera que se fije el precio de algunos bienes y servicio mientras se estabiliza la economía.  Asimismo, se debe suavizar la carga impositiva porque ello repercute en precio final.

Otros elementos  que hicieron que las prestaciones  se fueron al piso fueron  la “maxidevaluación” aunado al proceso de inflación. Colocó  como ejemplo el caso de un amigo que se jubiló en 2015 pero las  prestaciones se  las pagaron en 2018, cuando hubo la reconversión monetaria,  y  por 25 años de servicios  le pagaron 12 bolívares.

  “Lo que costaba un café en la panadería”, agregó para ilustrar la hecatombe económica.

Rojas insiste en que un incremento sustancial del salario el Gobierno ni la empresa privada no lo va a poder soportar. Entonces habría que buscar un mecanismo dual, que consistiría en  hacer un corte con una nueva prestación social y eliminar la retroactividad.

Es propicio recordar que en marzo de 1997 mediante una reforma a la Ley del Trabajo fue eliminado  el carácter retroactivo de las prestaciones sociales con el argumento de mejorar los salarios.

Luego, en 2012 se promulgó la  Ley Orgánica del Trabajo de los Trabajadores y Trabajadoras (LOTT) la cual  en su artículo 142 establece que trimestralmente el patrono debe depositar a cada trabajador el equivalente a 15 días calculados sobre la  base en el último salario devengado.

Y después del primer año de servicio se depositarán dos días de salario por cada año, acumulativo hasta 30 días de salario.

Prestaciones sociales en la UCI

Acerca del tema, El Informador Venezuela también consultó al abogado José Gregorio Saá, especialista en Derecho Laboral,  de entrada acusó falta de claridad de parte del Ejecutivo con relación al incremento los bonos de alimentación (cestaticket) y de “guerra”.

De hecho, el Decreto no ha sido publicado en Gaceta Oficial. A su juicio, este fue sacado por “fórceps” ante la dramática situación de los trabajadores del país. 

Explicó que constitucionalmente le corresponde al Ejecutivo, previo estudio conjunto en reunión tripartita con representantes sindicales,  OIT y del empresariado establecer un mecanismo  de aumento salarial “sustentable” en el tiempo para fortalecer el salario y no fue así, dijo.

Existe una disparidad de criterios y no se termina de comprender  -dijo- al recordar que  meses atrás Jorge Roig y el presidente de Fedecámaras Carlos Fernández  informaron que venía un aumento “importante” en el ingreso de los trabajadores y “entre gallos y medianoche” se hace un  decreto no ha sido publicado en Gaceta, reiteró.

Asimismo, el jefe de Estado dice una cosa y al día siguiente el ministro de trabajo, Francisco Torrealba sale a “interpretar” lo que quiso decir  el presidente Nicolás Maduro.

«Lo único claro es que el salario mínimo de 130 bolívares no fue tocado y se recurrió a bonos», resaltó.  

En ese contexto,  manifestó que de acuerdo con  el artículo  104 de la LOTT  el  salario integral tiene incidencia en el cálculo de prestaciones sociales del trabajador, por ejemplo, los bonos vacacional y fin de año y  otros conceptos derivados de La contratación laboral.

De manera que, “aunque estén en la UCI, el salario y las prestaciones sociales siguen con vida”, recalcó el abogado.

Sin medidas económicas no funciona

Coincidiendo con el economista Rojas, el empresario Giorgio Reni al igual que el economista Rojas no basta  aumentar el salario sino que además se  deben aplicarse medidas económicas.

 “Sin duda que cualquier incremento salarial que no esté acompañado de medidas económicas claras, no va a funcionar”, sentenció el empresario.

El salario pueden aumentarlo a 500 dólares, pero si no se controla la inflación en poco tiempo se convierte en “sal y agua”.

Enfatizó que existen factores adicionales al sueldo y salario que “hay que acomodar” y para ello hay que ponerse de acuerdo.

La Venezuela actual es distinta a la nación petrolera que vivía de un recurso no renovable que generaba mucho dinero que el Estado lo manejaba a su discreción.

“El país  de ahora lo vamos a tener que construir entre todos, los pequeños y grandes empresarios y los ciudadanos en general y hay que ponerse de acuerdo para que la “remuneración sea justa”.

¿Considera que hay que reformar la LOTT?

-Puede ser uno  de los factores y para eso todos los sectores deben ponerse de acuerdo, es necesario sentarse a conversar y es lo que estamos haciendo en la reunión tripartita.

¿Entre los puntos está la retroactividad de las prestaciones?

-Obviamente, porque si tú tienes empleados ganando buen dinero, pero tienen 10, 20 años de antigüedad, el peso de la retroactividad aumenta de una forma exponencial,  que en la práctica ninguna empresa puede soportar.

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