Una enfermera identificada como Hilda Lameda (61), perdió la vida al ser mordida por una serpiente en el caserío Pico e’ Gallo del municipio Torres, en el estado Lara, el viernes 2 de octubre en la noche y murió en la madrugada del sábado, al no poder ser trasladada al Hospital Pastor Oropeza de Carora, por falta de ambulancia y combustible.
La enfermera fue mordida por una serpiente a las 8:00 pm del viernes y llevada a un centro de salud cercano una hora y media después.
Lameda debía ser asistida con urgencia un una dosis de suero antiofídico para neutralizar los efectos del veneno de la serpiente sobre sus tejidos, pero sus familiares ni el personal del ambulatorio rural de Quebrada Arriba fueron auxiliados en la estación de servicio del caserío para ponerle gasolina al carro particular que haría el traslado al hospital.
Los familiares de la paciente y el personal del ambulatorio buscaron un carro particular para hacer el traslado y necesitaban gasolina para el viaje. En la estación de servicio del caserío, ningún empleado respondió a los parientes ni al médico cuando se acercaron en dos ocasiones.
Según los familiares de de Lameda, la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) tampoco les prestó ayuda cuando se acercaron al comando, mencionó otra fuente del sector salud del municipio Torres.
Lameda se complicó a las cuatro horas del accidente, tuvo vómitos, sudoración y la inflamación se extendió del pie hasta la rodilla.
Por el retraso por falta de gasolina, Lameda murió cuando iban en camino al hospital de Carora. “Nuestra gran limitante fue la falta de combustible”, advirtió una enfermera colega de Lameda que asistió a la paciente. Igualmente, condenó que en la estación de servicio hayan ignorado sus peticiones cuando se presentó la emergencia.
El fallecimiento de la enferma Hilda Lameda desencadenó protestas en el caserío Pico e’ Gallo la tarde de este sábado, confirmaron dos habitantes del municipio Torres.
DS con información de El Pitazo
Foto: Archivo
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