El organismo regulador de medicamentos de la Unión Europea dio luz verde el miércoles 6-E a la vacuna contra el COVID-19 de Moderna Inc., con lo cual el bloque de 27 naciones cuenta con una segunda vacuna.
Europea de Medicamentos ((EMA, por sus siglas en inglés) dio su aprobación —que requiere el sello de aprobación de la comisión ejecutiva de la UE— en momentos en que repunta la tasa de contagio en muchas de las 27 naciones del bloque y se multiplican las críticas por la lentitud con la que se realiza la vacunación en la región de 450 millones de habitantes.
La EMA aprobó en diciembre la vacuna de la farmacéutica estadounidense Pfizer y la alemana BioNTech. Ambas vacunas requieren dos dosis.
Antes de la reunión sobre la vacuna desarrollada por Moderna, la agencia explicó en un tuit que sus expertos estaban «trabajando duro para aclarar todos los problemas pendientes con la empresa», pero no ofreció más detalles. Moderna rechazó realizar comentarios.
Los primeros resultados de los estudios, todavía inacabados, muestran que las vacunas de Moderna y Pfizer-BioNTech parecen seguras y tienen una protección alta, aunque la de Moderna es más fácil de manejar porque no necesita estar ultracongelada.
Estados Unidos, Canadá e Israel ya han aprobado ese fármaco. Si la UE se une a la lista, la decisión tendrá que ser confirmada por la Comisión Europea antes de que pueda empezar la vacunación.
Tanto la de Moderna como la de Pfizer-BioNTech son vacunas de ARN mensajero, elaboradas con una nueva tecnología revolucionaria. No contienen ningún coronavirus, lo que supone que no pueden causar infección. En su lugar, emplean una parte del código genético que enseña al sistema inmunológico a reconocer las proteínas presentes en la superficie del virus y lo prepara para atacar si el virus hay un contagio.
La UE comenzó oficialmente la campaña de vacunación con Pfizer-BioNTech el 27 de diciembre, pero la velocidad a la que se administran varía ampliamente según el país. Francia inmunizó a unas 500 personas en la primera semana, mientras que Alemania inoculó a 200.000. Holanda fue el último país del bloque en arrancar su campaña.