A juzgar por la alta difusión en los medios de comunicación nacional, entre las medidas económicas anunciadas por el presidente Nicolás Maduro, la noche de este miércoles 5 de febrero, fue la autorización a empresas locales para emitir títulos valores en moneda extranjera, para su financiamiento y autofinanciamiento.
El anuncio se produce inmediatamente después que la empresa Ron Santa Teresa vendiera acciones como alternativa para buscar financiamiento, y significa una flexibilización – inesperada- de estrictas regulaciones vigentes por años.
Maduro no dio más detalles, por lo que habrá que esperar la correspondiente normativa de la Superintendencia Nacional de Valores, que, indicaron fuentes financieras, ya está en proceso de preparación.
MEDIDA ESPERADA
De acuerdo a la agencia Reuter, la medida no podía pasar desapercibida considerando que empresarios del país ya venían pujando para tal flexibilización, y además, vaticinan un giro irreversible – al estilo de China y Rusia- en la economía venezolana.
Fue el vicepresidente del sector económico, Tareck El Aissami, quien abanderó la propuesta y, a juzgar por las declaraciones de Maduro, forma parte de un manojo recabadas en reuniones con empresarios nacionales celebradas desde enero 2020.
El Jefe de Estado aseguró que los empresarios y empresarias han venido trabajando en un proceso de consultas y de actualización de las políticas necesarias para la reactivación económica.
EXPECTATIVAS
A la par de la sorpresa y la expectativa, también hay muchas dudas. Por ejemplo, Bernardo Rodríguez, gerente del departamento de ventas de Rendivalores, reconoció a ElPitazo que la medida representa una nueva ventana de oportunidades frente a la ausencia de financiamiento en el país, pero aún cuando se desconocen vitales parámetros legales.
En tanto, José Miguel Farías, director financiero de la correduría Rendivalores, dijo a perfil.com que la medida se aprueba en medio de fuertes limitaciones debido a las sanciones y a la contracción misma de la economía.
En tal sentido, explica, la prima de riesgo de Venezuela es tan alta que los inversores probablemente exigirán rendimientos muy altos de la deuda, por lo que es un activo atractivo en un entorno regulatorio complicado.
No obstante, Rodríguez considera que el gobierno, ante sus necesidades, buscará acercarse al sector privado a través de acciones que le faciliten financiamiento, lo que a su vez significa estimular la economía nacional y generar liquidez.