Comerciantes, dueños de restaurantes y otros negocios, protestaron furiosos por las restricciones impuestas por el gobierno de Italia durante semanas debido a la pandemia del COVID-19, se enfrentaron con la policía el martes frente al Parlamento de Italia en Roma.
Entre la multitud de manifestantes se quitaron las mascarillas para gritar “¡Trabajo!” y “¡Libertad!”. Algunos lanzaron granadas de humo y diversos objetos.
La restricciones de las autoridades italianas prohíben la apertura al público de restaurantes, bares y cafés hasta finales de abril. Solo están permitidos los servicios de venta para llevar o entrega a domicilio.
Los agentes intentaron frenar a los manifestantes que trataron de pasar una barrera. Un oficial resultó herido en los enfrentamientos, informó la agencia noticiosa italiana LaPresse.
El gobierno actual y sus predecesores han asignado millones de euros para ayudar a los sectores más afectados por las cuarentenas.
Los pequeños empresarios insisten en que deben reabrir en forma permanente. Los restaurantes y cafés en las llamadas “zonas amarillas”, aquellas regiones con menor incidencia de casos y menor impacto para las unidades de cuidados intensivos de los hospitales, están autorizados a recibir clientes en sus locales durante el día hasta el atardecer.
Pero un pico actual de contagios, debido principalmente a las variantes del virus, ha visto decenas de miles de casos nuevos y centenares de muertes por día desde hace meses.
Por eso, el gobierno eliminó temporalmente la designación de “zona amarilla” a partir de la Semana Santa y hasta finales de abril.
DS con información de AP/Foto: AP