Poco después de que los principales medios de comunicación de EEUU lo dieran como ganador de las presidenciales, Biden declaró que se siente “honrado” por la victoria electoral e hizo un llamado a la unidad nacional.
“Ahora que ha concluido la campaña, es hora de dejar atrás el rencor y la áspera y unirnos como nación”, dijo Biden en un comunicado.
“Somos los Estados Unidos de América”, continuó. “Nada es imposible para nosotros si lo hacemos unidos”.
Trump, que no admite derrota alguna, advirtió en un comunicado que “nuestra campaña comenzará a presentar argumentos en los tribunales para garantizar que las leyes electorales sean respetadas y que el verdadero ganador de las elecciones asuma la presidencia”.
Biden, de 77 años, hizo campaña no tanto en base a promesas políticas o ideológicas sino a la idea de que había que forjar una coalición nacional para derrotar a Trump, al considerarlo una amenaza para la democracia norteamericana. La estrategia resultó eficaz al anotarse triunfos en Michigan, Wisconsin y Pensilvania, antiguos baluartes demócratas que en el 2016, sorpresivamente, se inclinaron por Trump.
Biden está encaminado a ganar el voto popular por más de 4 millones de votos y esa cifra podría aumentar a medida que continúa el escrutinio.
“El trabajo que tenemos por delante será duro, pero les prometo esto: seré un presidente para todos los estadounidenses, hayan votado por mí o no”
Trump usó las demoras en el conteo en algunos estados para lanzar acusaciones falsas de fraude y de que los demócratas estaban tratando de robarse las elecciones, un caso sin precedente de un mandatario de Estados Unidos, según los mismos medios.
La compañera de fórmula de Biden, Kamala Harris, hace historia: es la primera mujer negra en ser vicepresidenta, una hazaña surgida justo en momentos en que la sociedad estadounidense se ve estremecida por reflexiones y rencores en base al trato dado a su población de raza negra.
Harris, quien es senadora por California, será además la primera persona de ascendencia sudasiática en llegar a la vicepresidencia y la mujer que ocupará el más alto cargo ejecutivo hasta ahora de Estados Unidos, cuatro años después de que Trump derrotó a Hillary Clinton.
Trump es el primer presidente estadounidense en perder la reelección desde que lo hizo George H.W. Bush en 1992. Hasta ahora Trump no ha admitido su derrota.
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TEXTO Y FOTO AP