ICOLT / La vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, reaccionó a las nuevas sanciones que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió contra siete venezolanos.
Al respecto dijo que ”no son sanciones, son medidas arbitrarias porque no están contempladas en ninguna ley internacional”. Además sentenció que se trata de sanciones unilaterales e ilegítimas.
”Quienes imponen estas medidas arbitrarias piensan que uno anda preocupado por eso, lo que si denunciamos es el grave bloque financiero que hay sobre Venezuela y afecta a nuestra población”, toda vez que dificulta la adquisición de alimentos y medicinas.
Denuncia ante la OMC
No obstante, este martes 8 de enero el gobierno de Venezuela presentó ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), con sede en Ginebra, un recurso iniciar en relación con las sanciones económicas del Gobierno de Donald Trump contra el Ejecutivo de Nicolás Maduro.
Es la segunda vez en su historia que Venezuela intenta una acción de este tipo en la OMC.
El país caribeño pide someter a análisis el decreto presidencial con el que se prohibió toda transacción financiera con origen en Estados Unidos relacionada con el petro, o el que impide al Gobierno de Maduro la venta o la garantía de determinados activos financieros venezolanos.
Venezuela argumenta que algunas leyes y normas de EEUU relativas a los bienes de origen venezolano, la solvencia de la deuda pública del país suramericano o las transacciones en la divisa digital “petro”, entre otros aspectos, son incompatibles con los acuerdos internacionales de comercio de productos y servicios.
EEUU tiene 60 días para responder a la denuncia de Venezuela ante la OMC, después de lo cual el Gobierno de Maduro podría pedirle al organismo que se pronuncie.
Sin embargo, según Reuters es poco probable que esta acción legal genere preocupación en Washington, en parte porque la OMC permite excepciones a sus reglas si existen “intereses de seguridad esenciales”.
Acota el análisis de la agencia noticiosa que es poco probable que esta acción legal genere preocupación en Washington, en parte porque la OMC permite excepciones a sus reglas si existen “intereses de seguridad esenciales”.