Las autoridades australianas sacrificarán a más de 10 mil camellos cimarrones, luego de que los representantes de los pueblos originarios advirtieran que los animales están consumiendo «mucha agua» y poniendo en riesgo la vida de los habitantes de su comunidad.
Marita Baker, miembro de la Junta directiva local, indicó que los camellos estaban causando problemas en su comunidad de Kanypi.
«Hemos estado atascados en apestosas condiciones de calor e incomodidad, sintiéndonos mal porque los camellos entran y derriban las cercas, vagan alrededor de las casas y tratan de conseguir agua a través de los aires acondicionados», detalló.
Los cazadores que participarán en esta matanza dispararán a los animales desde varios helicópteros y todo el procedimiento tardará aproximadamente cinco días, consignó el sitio australiano News.com.au.
Un portavoz del Departamento de Ambiente y Agua de Australia ratificó a News.com.au los problemas que denunciaron los pueblos originarios y dijo que la operación para exterminarlos se hará «de acuerdo con los más altos estándares de bienestar animal».
«Algunos camellos mueren de sed o se pisotean para tener acceso al agua (…) En algunos casos, los animales muertos han contaminado importantes fuentes de agua y sitios culturales», aclaró.