Juan Tomás Martínez: De donde yo soy la música y la poesía son hermanas del calor y del viento < El Informador Venezuela
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Juan Tomás Martínez: De donde yo soy la música y la poesía son hermanas del calor y del viento

                                            Juan Tomas Martínez Yepez es  uno de los cantantes de Ópera venezolanos con más prestigio y trayectoria a nivel internacional, su nombre es sinónimo de éxito en los grandes teatros de Europa y Latinoamérica y para los caroreños recuerdo y orgullo porque su padre, homónimo, es un icono cultural para esta ciudad y están seguros que desde la inmortalidad siempre se coloca en primera fila para aplaudir al hijo que pasea el nombre de ambos con brillo  y calidad artística superior.

                                                 Si el ser cantante de fama  a nivel mundial no fuera suficiente Juan Tomas es el compositor del himno canción que los caroreños entonan con alegría y algunas veces con melancolía por todas las partes del planeta donde se encuentren: Donde Baila el Viento.  Esta canción explica con profundo amor telúrico la manera como el caroreño siente a su terruño, de donde yo vengo cantan en Europa, cantan en Canadá y Estados Unidos, en África y Oceanía en Argentina, Chile y Asia, el viento es música que hace bailar al viento. El cuatro se entusiasma y hace rasgueos trepidantes y la voz sube a los cujíes y regresa como una trompeta para anunciar soy de Carora, donde la música y la poesía dan conciertos a dúo para honrar la resistencia del espíritu ante soledades seculares.

                                              Juan Tomas al saber que habíamos fundado un grupo para luchar por la Constitución y la Democracia y que allí participaban caroreños de inmediato pidió sumarse  y sus aportes son invaluables. Ahora es promotor de primera línea para la creación de un  Consejo Consultivo para la ciudad de Carora, para lo cual existen conversaciones adelantadas entre la doctora Milagro Gómez de Blavia y el  alcalde Javier Oropeza.

Conexión inalámbrica:

La conexión que sentimos los caroreños con nuestro origen, tiene una dimensiónón muy difícil de explicar.  En mi caso, esta dependencia vital o sentimiento de apego emocional, ha sido inevitable. Mi justificación ante quienes no entienden esta obsesión por Carora es que en realidad lo que importa no es el lugar, ni el pueblo y sus coordenadas geográficas, sino su gente, las memorias individuales y colectivas que atesoramos y protegemos los caroreños.

No importa qué tan lejos me he encontrado o cuánto tiempo haya pasado sin ver a mi gente, siempre estarán presentes en mi vida. El Padre, Dr. Alberto Álvarez (Padre Beto) ha denominado esto como “La Caroreñicidad”.

Hoy día, gracias a la tecnología, aunque se logre romper el cordón umbilical,  la conexión inalámbrica de diversas plataformas de internet, permiten el flujo de información instantánea, globalizada  e inevitable. Todo lo que pasa, viaja a la alta velocidad en el  ciberespacio y uno se entera, quiera o no, casi inmediatamente de las noticias buenas y las malas.

Yo soy un apasionado familiar, amigo, gestor y heredero del Karma de la preocupación y ocupación por la gente de Carora y de Venezuela. No tengo forma de escapar de la influencia que  esa fuerza ejerce en mi vida.

Mi amor por el terruño lo he manifestado de muchas formas y quizás la más conocida sea el expresado a través de mis canciones como:

DONDE BAILA EL VIENTO:

“ No vengo de lejos vengo de Carora, donde baila el viento y canta la aurora.”

Y también:

CARORA, CIUDAD DE LUZ:

“Nadie se va de Carora, nadie se va para siempre, Nadie se va y no vuelve.”

Nos duele mucho a los Caroreños  lo que le ha pasado a la ciudad que vivimos y disfrutamos en nuestra infancia. Era una  Carora segura, con servicios públicos eficientes, transporte público funcional, economía local dinámica, educación pública y privada dignas. El deterioro de la vida de sus habitantes es solo el reflejo a nivel local del desastroso caos que vive toda Venezuela.

Desde el Movimiento Decode, debemos seguir con el empeño de crear conciencia de las prioridades, las urgencias más graves por las que atraviesa nuestra región.

Las iniciativas para solucionar problemas puntuales para mejorar las condiciones de vida en el Municipio Torres. Muestras de estas iniciativas son las acciones del Cantón Carora que en respaldo al Alcaldía y su alcalde Javier Oropeza, simbolizan ejemplos claros del camino que se debe tomar para ejercer el derecho ciudadano positivo. Nuestra lucha debe empezar por la solución al terrible problema del agua. Es importante que se prepare un informe con el diagnóstico exacto del problema del agua en Carora y sus alrededores y que se explique en detalle, cuáles son los recursos necesarios para solucionar su suministro.

La sociedad civil organizada, apoyándose en las instituciones e instancias que se presten a cooperar, debe ejercer la gerencia y ejecución de este tipo de acciones prácticas, sin esperar ya más la ayuda de quienes claramente han demostrado que no nos van a ayudar.

Crear un Consejo Consultivo para la ciudad de Carora, es imperativo. Carora cuenta con un inmenso talento humano, preparado profesionalmente en las diversas carreras de ingeniería, economía, planificación, educación y gerencia para asumir estos retos.  Ya no podemos seguir esperando por el poder político, es hora de potenciar la activación del poder ciudadano, la iniciativa privada y ocuparnos de nuestros asuntos.

Reparar las cañerías de aguas negras (sistema de cloacas) de la ciudad es urgentemente necesario. Las calles llenas de huecos y su asfaltado deficiente son una vergüenza. Se podría encargar a una empresa privada local el servicio de reparación y mantenimiento, con un presupuesto periódico, que permita anticipar la gestión de los recursos necesarios para cubrir su costo. Lo mismo con el alumbrado y limpieza de calles y sitios públicos.

Tomar parte de la reorganización, dotación y gestión de recursos para nuestras escuelas  públicas y centros de salud, deben formar parte de nuestra actividad cotidiana.

Un buen ejemplo de autogestión a través del apoyo empresarial y comunitario, es el  logrado por el Complejo Cultural Juan Martínez Herrera, el cual agrupa: La Asociación Civil Casa de la Cultura de Carora, Orquestas y Coros, Escuela de Bellas Artes, Grupos y Escuelas de Teatro, Danza y Música Popular, Fundación Orfeón Carora, Fundación Teatro Alirio Díaz, Actividades Recreativas y Deportivas. El esfuerzo que se ha hecho durante más de cincuenta años en estas instituciones ha dado resultados fabulosos. Esta obra iniciada por mi padre, Juan Martínez Herrera, continúa viva y creciendo, gracias al trabajo de gente muy valiosa y el apoyo de una fuerza comunitaria decidida y organizada.

No podemos seguir permitiendo que acaben por destruir la esperanza de recuperar la dignidad de nuestra forma de vida ciudadana y nuestro bienestar. Ya basta de dejarnos maltratar sin hacer lo suficiente.

Si se puede hacer lo necesario.

Los Caroreños, los Larenses, regados por el mundo tenemos que comprometernos a contactar con instancias internacionales y lograr recursos económicos, equipos, asesorías y ayudas para remediar los problemas más esenciales que padece nuestra gente.

Creo imperativo utilizar oficialmente, con la respectiva documentación a personas en el exterior para que tengan la debida autorización para gestionar estos recursos y asegurar la transparencia de dicha gestión.

Ya no podemos seguir esperando por el poder político, es hora de potenciar la activación del poder ciudadano, de  la iniciativa privada y ocuparnos de nuestros asuntos.

Sueño cada día con volver a mi tierra a luchar y siento que no falta mucho para que las ganas de regresar me venzan y me vaya, como han hecho tantos caroreños, que después de hacer vida y desarrollar carreras en diferentes lugares remotos del mundo, como los salmones, nadando contra corriente, retornan a pasar sus últimos días y morir en el lugar en que nacieron.

Llegará ese día en que cuando me hagan las preguntas tan caroreñas: Cuando llegaste?, mi repuesta sea: acabo de llegar. Y cuando te vas?

Yo conteste: ya no me voy más.

                                                      Bajo/ Barítono

Natural de Carora, Venezuela, el barítono Juan Tomás Martímes cuenta con una amplia Trayectoria artística internacional como cantante de ópera, zarzuela, oratorios, recitales

y musicales.

 Realizó estudios de canto, dirección coral, orquestal y clarinete, obteniendo

La Licenciatura en Música en la Universidad de Wisconsin (Madison, Estados Unidos),

Donde comenzó su carrera de solista, ofreciendo numerosos recitales y realizando varias

Giras por los Estados Unidos al lado del Concert Choir de dicha universidad.

 Fue Galardonado durante tres años consecutivos con los premios del Departamento Coral y de Ópera de la Universidad.

En Mayo de 2014 obtiene M.A, una Maestría en La Universidad Central de la Florida, USA Desde donde proyecta su ascendente carrera como profesor, compositor y cantante.

Enseña Canto en Valencia Community College y en Avalon School of Music en Orlando, Florida, USA. Desde enero de 2011 integró el equipo de profesores de la Universidad Central de Bogotá.

Ha actuado en Perú, El Salvador, Ecuador, Puerto Rico, Colombia, Venezuela, República Dominicana, Estados Unidos, España, Portugal, Francia, Alemania, Italia, Bélgica, Rumania y Bulgaria.

  Entre sus papeles principales en la ópera destacan: Marcello y

Schaunard (La Bohème), Sharpless (Madama Butterfly), Gianni Schicchi, Frank (Edgar),

Conte (Le Nozze di Figaro), Papageno (Die Zauberflüte), Malatesta (Don Pasquale),

Enrico (Lucia de Lammermoor), Belcore (L’elisir d’amore), Figaro (Il Barbiere di Siviglia),

Germont (La Traviata), Alfio (Cavalleria Rusticana), Ulises S. Grant (Mother of us All), Ricci (La Serva e l’ussero), Colón (Los Martirios de Colón), Posa (Don Carlo) y el papel titular de Rigoletto.

La temporada 2002-2003 interpretóó a Otello en el Teatro la Maestranza de Sevilla; cantó el Figaro de Il Barbiere di Siviglia en Bogotá y Caracas, Novena Sinfonía de Beethoven y Carmina Burana en Bogotáá, Caracas y Murcia, así como la producción de Merlín y de Traviata del Teatro Real de Madrid, gala lírica en Jerez, giras de zarzuela por Valladolid,

Oviedo y Costa Rica y varios recitales de música francesa, La Revoltosa, dentro de la V edición del Festival Internacional de Música de Galicia e Il Barbiere di Siviglia en Valencia.

En la temporada 2003-2004, hay que destacar el papel de Germanno de La Scala di Seta de Rossini en el Teatro de la Maestranza de Sevilla, con gira posterior en Italia, Lescaut de Manon Lescaut en el Teatro Villamarta de Jerez, Paolo en Simón Boccanegra en el Festival de Ópera de Las Palmas de Gran Canaria, Albert en Werther en el Palacio de

Festivales de Santander y varios conciertos como la Cantata de Bach Ich habe genuch en Pamplona, dos Galas en las Palmas de Gran Canarias o la inauguraciónón del Festival Internacional de Música de Galicia en una Gala Lírica junto con el tenor Aquiles Machado.

Sus recientes compromisos incluyeron Rigoletto en Venezuela, una gira por España con Sharpless (Madama Butterfly) y El Manojo de Rosas y Carmen, en Colombia.

 Fue ovacionado recientemente por público y crítica, en la VII Edición del Festival Internacional de Música de Galicia, en el papel de Roque de la ópera Marina, y en el papel de Malatesta de Don Pasquale, en Irún. Se ha destacado su participación en la producción de Pelayo de Mercadante, en el Teatro Jovellanos de Gijón y próximamente interpretará el rol de Marcello (La Bohème), en el Palacio de Festivales de Santander.

Tour nacional español con TRovatore, Bohéme, Nozze di Figaro y Don Giovanni.

En Las Palmas cantó el Michonet de Adriana Lecouvreur. Padre Capuleto en Romeo y Juliette en Jerez de la Frontera (España). Grabación en vivo del CD 20 aniversario de Virtuosi de Caracas, cantó Lieder Eines Fahrenden Geselen dirigido por Manuel Hernández Silva coOrquesta Sinfónica de Córdoba, España.

Jorge Euclìdes Ramírez

Foto: Cortesía

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