“Yo sigo peleando, me sigo esforzando”. Así lo señalaba el ingeniero Abelardo Riera Zubillaga, persona de aquilatados meritos empresariales, cristianos y familiares, quien a los 89 años de edad, dejó de existir la noche de este viernes, en la clínica Acosta Ortíz, donde estaba internado.
Persona sencilla de extraordinaria calidad humana, Don Abelardo Riera fue un empresario de gran visión. Hombre de campo, se erigió en eje fundamental en la industria y la banca.
Como un buen caroreño, Don Abelardo Riera contaba las anécdotas que lo llevaron a ser un hombre del campo con una gran visión empresarial..
Presidió un grupo de empresas en Barquisimeto en un pujante desarrollo que se proyectó a nivel nacional.
Ejerció con gran desempeño la presidencia de la Cámara de Industriales del estado Lara.
Hombre dado a la conversación, Don Abelardo Riera Zubillaga, nacido en Carora, confesaba estar acostumbrado a las familias numerosas. Recordaba a su mamá quien tuvo siete tios y 169 primos hermanos. La vida le había premiado con 13 nietos y 2 biznietos, indicaba en una entrevista. “ Me siento muy orgulloso”.
Fuerte influencia de la religió católica en su educación primaria en Carora hasta el tercer grado, luego interno en el Colegio San José en Mérida donde curso otra parte de sus estudios. Retorna a Carora donde recibe una excelente formación académica.
En el año de 1951, viajó a Brasil para seguir estudios universitarios donde se graduó de ingeniero agrónomo especializado en cañicultura.
Al regresar asume la conducción de las fincas de su padre y en Barquisimeto ya con una brillante trayectoria como empresario, decide sembrar unas tres mil hectáreas de caña en una zona entre Barquisimeto y Yaritagua, labor que se logra con trabajo, pero desafortunadamente las confiscaciones terminaron el magnífico plan.
No ocultaba nada al señalar: “. Conozco muy bien cómo se debe sembrar y hacia dónde se debe invertir””
A lo largo de su vida al lado de su estimada esposa Doña Gladys Arévalo de Riera, orgullosamente levantaron una familia de extraordinarias virtudes humanas y religiosas.
Vale la pena mencionar que fue uno de los baluartes de los Cursillos de Cristiandad y de otros movimientos de la Fe católica. Lideró emprendimientos, entre los cuales figura el proyecto Luces con el cual diferentes escuelas de sectores deprimidos reciben apoyo económico de las empresas para que los niños reciban una educación adicional en su tiempo libre con tareas dirigidas y actividades deportivas de gran calidad.
Igualmente fue una de las figuras fundamentales para la instalación en Barquisimeto de los Colegios Río Claro y Las Fuentes, como contribución al desarrollo educativo en la región larense. Alegría y satisfacción por ello.
Igualmente fue uno de los directivos al constituirse en Barquisimeto la Asociación Cardiovascular de la Región Centro Occidental (ASCARDIO) en el año de 1976, centro de referencia nacional para el tratamiento de enfermedades cardiovasculares y otras patologías. Acompañó en la fundación de esta extraordinaria institución a Tulio Fernández, Vicente Furiati, Pedro Pablo Izaguirre, Fernando Aristiguieta, Félix Otamendi Osorio, Carlos Sequera Yépez, Jorge Hernández Rovatti, Paolo D’Onghia y Franco Sessa. A ellos les acompañó igualmente dirigentes sindicales y la jerarquía eclesiástica encabezada por monseñor Críspulo Benítez Fonturvel, Arzobispo de Barquisimeto.
Poco conocido el pasaje de Don Abelardo Riera como concejal del entonces Distrito Iribarren, poco después de la caída del régimen de Marcos Pérez Jiménez. Su tarea fue resguardar el orden del pueblo durante el período de transición.
Apasionado del beisbol, como buen caroreño, ejerció funciones de administrador del Cardenales de Lara a solicitud de Don Antonio Herrera Gutiérrez, propietario original de la divisa.
Abelardo Riera todo un persona modelo de tenacidad, honorabilidad, esposo ejemplar precisaba: “Dios nos pone a cada uno en un lugar… Por eso, hay que trabajar, hacerlo bien, porque quien nos está viendo es Dios. “-Soy profundamente católico y colaboro con la Iglesia. Si nosotros como fieles no estamos a su disposición ¿Quién lo hará?”
Descanse en paz este caroreño, larense y venezolano ejemplar. Dios le reservó un lugar a su lado. Desde El Informador presentamos nuestras condolencias a su esposa, hijos, nietos, demás familiares y amigos.
Lázaro Aranguren
Foto: Cortesía R. Minuto.