Uno de los derechos básicos del ser humano, recogido en la Constitución Venezolana y en todas las existentes a nivel planetario tiene que ver con la promoción de una vida sustentable y ello es imposible sin el cuidado minino al medio ambiente, a la naturaleza. Hoy el Movimiento DECODE dedica su espacio a unas reflexiones que al respecto hizo Jorge Euclides Ramírez en un taller conservacionista promovido por jóvenes masones centrados en el tema ambientalista.
ECOLOGIA Y SOCIEDAD
Relacionar Ecología y Sociedad en estos momentos refiere inevitablemente una confrontación dado que las amenazas planetarias contra el medio ambiente nacen del tipo de Sociedad en la cual vivimos, donde existe un notorio divorcio entre las metas individuales y grupales que tenemos como humanos y las necesidades de equilibrio biológico que requiere la nave celeste que nos transporta.
Aunque parezca paradójico los primeros que avizoraron este peligro fueron los anarquistas, a quienes la Historia ha satanizado como destructivos, cuando formularon la tesis de la Ecología Social.:” La ecología social es una disciplina filosófica fundada por Murray Bookchin. Se define como una escuela del ecologismo y del anarquismo que busca un manejo humanista del medio ambiente, y afirma que existe una relación holística entre los seres naturales, incluidos los seres humanos, que lleva a afirmar a los ecólogos sociales que el orden natural no necesita autoridades ni mando centralizado, sino que es descentralizado y en red. Eso significa que la naturaleza se autorregula y de igual forma pueden organizarse los humanos, que producen los problemas ambientales sólo cuando introducen procesos autoritarios en sus sociedades.
Propone el desarrollo sostenible de la biotecnología, la tecnología adecuada y la arquitectura sustentable en lo técnico, y en lo político la gestación de instituciones libres, localistas e interconectadas en redes federativas biorregionales, junto con una economía ecológica.”
No obstante lo remoto de estos planteamientos hace imperioso abarcar este tema bajo la luz de estudios y diagnósticos más recientes, sobre datos obtenidos básicamente de la Biología aunque a partir de ellos podamos hacer inferencias integrales que tocan el nivel de la conciencia y la espiritualidad.
Así tenemos que debemos entender la Ecología como una tentativa humana de conocimiento y comprensión de una cierta categoría de fenómenos naturales, utilizando métodos científicos. El nivel o escala a que se estudian estos fenómenos es el de Ecosistema, sistema compuesto por organismos de muchas especies que viven juntos y por los factores fisicoquímicos del ambiente que los rodea, implicados en un proceso incesante de interacción.
El termino Ecología proviene del griego, Oikos que significa Casa y parece que fue empleado a mediados del siglo 19 por naturistas y filósofos para designar de algún modo los estudios de animales o plantas en los que se tenía en cuenta su entorno y el tipo de paisajes a que daban lugar. Se acepta que fue el biólogo alemán Ernst Haecket quien acuño esta definición en 1869.
La ciencia ecológica se ocupaba de los organismos vivos tal como se encuentran en condiciones naturales en sus “hogares”. En la actualidad la Ecología se define como la biología de los ecosistemas, estudiando las relaciones del clima, de los elementos y los compuestos químicos con los seres vivos, y de estos entre si, como procesos de intercambios de materia y energía o como sustituciones de unos individuos por otros.
COMO ES ARRIBA ES ABAJO
Es tarea de quienes como ustedes se dedican a reflexiones profundas donde se enlazan tiempos y espacios para buscar verdades esenciales, introducirse en el tema ecológico con una visión que transcienda lo biológico como especialidad científica, tomar estos datos y convertirlos en plataforma cognitiva para volar hacia una comprensión cósmica de nosotros mismos.
A final de cuentas el estudio de los Ecosistemas es el estudio de una red de sistemas interrelacionados entre sí. La Ecología se define como la biología de los Ecosistemas, esta definición la hace una ciencia claramente separable de las demás y por ello potencialmente sujeta de ser imbricada con ese Todo donde se fusionan ciencia y filosofía.
Incluso quien propuso el nombre de Ecosistema para demarcar los espacios físicos a estudiar, Tansley, lo definió como un sistema completo, compuesto por organismos y el complejo total de factores físicos que forman el ambiente que los rodea y añadía:” Estos ecosistemas constituyen las unidades básicas de la Naturaleza y pueden considerarse una de las categorías de sistemas físicos del Universo que van desde el mismo Universo hasta el átomo”.
Esta definición de Ecosistema valida pues todo el conocimiento sobre el cual ustedes trabajan y que tiene como misión entender las formas mediante las cuales el ser humano logra su acoplamiento dentro de la red inconmensurable de intercambios de energía de la cual somos parte. Explica también como desde nuestra pequeñez recibimos influencia de astros y galaxias que interactúan con la Tierra a velocidades de vértigo. En fin, reflexionando sobre este tema, podemos arribar a lo que ustedes saben: Como es arriba es abajo, aunque para nosotros, los no iniciados, sea algo infuso e incomprensible.
LA CARCEL DEL TENER
En la cultura política que nos orienta y conduce se ofrece la libertad como el valor fundamental, la superación económica como un destino al alcance de todos, la vida como ejercicio de infinitas posibilidades. Pero debemos preguntarnos a cual libertad se refiere, que implica la superación económica y como está compuesta la infinidad a la cual podemos optar. Lo cierto es que vivimos en la finitud de un tiempo tobogán y en el claustro de una Biosfera de dimensiones muy modestas sobre la cual no tenemos conciencia y por ello la imaginamos de magnitudes insondables.
El problema es que nuestro mundo está cuantificado por el precio de una casa, para el que la tiene, de un vehículo, por el costo de la cesta básica, el colegio de los niños, el costo del viaje en vacaciones…y de todo esto hacemos un plan de vida que ignora la realidad física y biológica del lugar donde vivimos. Nos acostumbramos a hablar de miles y miles de kilómetros entre ciudades y continentes, de distancias intergalácticas recorridas por las naves de la NASA, en fin, hablamos de números y estadísticas como un dato de la mente pero no “sentimos” lo que somos respecto a la franja biológica que nos contiene. Cuando nos hablan de Biosfera no la percibimos como algo inmediato sino como un lugar que según los periódicos se está contaminando.
Entonces para ubicarnos revisemos de forma rápida lo que es la Biosfera. Ella es la cubierta viva de la Tierra. Se extiende por toda su superficie pero su espesor es insignificante en comparación con los seis mil kilómetros de radio terrestre. A más de siete kilómetros sobre el nivel del mar la vida prácticamente no existe, Las plantas no llegan a más de seis mil metros de altitud en el Himalaya debido a la falta de agua líquida y a la escasa concentración de dióxido de carbono. El límite de vida animal se considera más alto, los seis mil setecientos metros, sin embargo pocos animales viven a esta altura. A la vida en estas alturas la limita la falta de alimentos y la carencia de oxigeno, así tenemos que la mitad de la masa total de la atmosfera se encuentra entre la superficie de la tierra y unos cinco mil tres cientos metros de altitud.
En el mar la franja de vida es apenas hasta los cien metros de profundidad, con todo y que tiene una profundidad promedio de cuatro kilómetros y fosas abisales de once kilómetros.
Total, lo que llamamos vida está contenida en una franja de apenas cinco kilómetros y medio, una distancia que muchos caminan todas las tardes para darle tono a su sistema cardiovascular. Sin embargo hablamos de la vida como algo que no tiene límites de espacio. Y puede ser que no los tenga si la entendemos y asumimos como una esencia ubicua heterodirigida por energías cuánticas. El Braman, el Éter, el Tao, el Cosmos…el Uno y el Todos.
El asunto es que al igual que estamos desconectados de la plataforma material que nos sostiene, igual lo estamos y mas a oscuras, respecto a las fuentes del Ser.
Debemos concluir así que Sociedad y Ecología son para el mundo de hoy mundos paralelos. Vivimos lo que está en nuestra mente y no en nuestros entornos. La solución no es fácil, tenemos que Despertar y para ello hace falta abrir con clavos dolorosos el claustro de nuestra ignorancia. Ustedes con su conocimiento tienen allí un reto y de vencer su único premio será el silencio….que es un gran premio.
Jorge Euclides Ramírez
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