Este domingo fue inaugurada en la iglesia La Cruz, de Barquisimeto, una capilla dedicada exclusivamente a una especial reliquia: una astilla de la cruz de Jesucristo.

La actividad estuvo dirigida -o conducida- por los sacerdotes Edgar Meneses y Hernando Betancourt, párroco y vicario de la parroquia del mismo nombre, respectivamente, y por el laico Carlos Páez.
Se cumplieron allí diferentes actos litúrgicos, como parte de la ceremonia eucarística integral, tales como lo fueron la bendición de la capilla, más la respectiva colocación de los santos óleos, y, finalmente, la entronización propiamente dicha de la reliquia en la pequeña bóveda levantada dentro de la capilla con tal fin, y en la cual comenzó desde ya a ser exhibida, con el objeto de que la feligresía católica acuda allí a observarla y a venerarla.
Se informó allí que, desde el mismo momento de la bendición de la capilla interna del templo, comenzó a regir el año jubilar, concedido por decreto de de la Santa Sede.
Además, se leyó el decreto emanado de la Arquidiócesis de Barquisimeto en respuesta a tal concesión.
El año jubilar implica que, durante este lapso, los fieles pueden hacer una peregrinación (visita) individual o colectiva ante la referida reliquia entronizada, para, de esa manera, una vez se haya cumplido con los debidos requisitos, recibir indulgencia plenaria divina.
IMPORTANTE
Obsequiada por el Papa Juan XXIII a Monseñor Críspulo Benítez, la reliquia reposa desde hace varias décadas en la capital de Lara, convirtiéndola en una de las pocas ciudades de Latinoamérica que posee una de estas piezas.
Producto de la colaboración de los feligreses, esta capilla viene a sumarse al patrimonio religioso larense que le da también al estado una condición de región espiritual de #Venezuela.
Vale recordar que en la iglesia de Sarare, capital del municipio Simón Planas, reposa otra reliquia como lo es la muestra del aceite bendito de la tumba de San Nicolás de Bari.
REINALDO GÓMEZ
FOTOS: Ángel Zambrano