ICOLT / “Han convertido una toma de posesión en una guerra mundial (…) se han desatado las fuerzas extremistas contra Venezuela», sentenció este 9 de enero el presidente Nicolás Maduro, en relación a los últimos pronunciamientos del Grupo de Lima (GL), al cual dio 48 horas para «rectifique su política intervencionista contra Venezuela”.
Lo dijo durante una rueda de prensa con periodistas nacionales y extranjeros celebrada en Miraflores, donde advirtió que de no haber rectificación «el gobierno de Venezuela tomará las más urgentes y crudas medidas diplomáticas para la defensa de la integridad, la soberanía y la dignidad» del país.
Las declaraciones las da a pocas horas de la ceremonia con motivo de su juramentación para un segundo mandato presidencial, y a pocas de que la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) aprobara un decreto apoyando cualquier acción que el Ejecutivo adopte para defender el territorio venezolano.
el mandatario diojo que actualizará ante la ANC un conjuntos de medidas “necesarias para vencer la hiperinflación inducida y la guerra económica”.
Y es que nuevamente el mandatario denunció que contra Venezuela se está fraguando un golpe de Estado comandado desde Washington, y por ello las instituciones del Estado están alertas, incluyendo la fuerza armada.
“Cualquiera que pretenda dar un golpe de Estado se va a enfrentar con la fuerza armada», advirtió, coincidiendo con el reciente pronunciamiento del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, fustigando las acciones del GL y el gobierno de EEUU.
Y precisamente EEUU salió a relucir en las declaraciones, a propósito de reafirmar su intención de dialogar con la oposición.”Ojalá se de un diálogo político serio por la paz del país y lo mismo digo con el gobierno de Estados Unidos (…) yo creo en el diálogo ojalá el gobierno de Estados Unidos rectificara la política iniciada por Barack Obama”.