El papa Francisco alertó hoy en el Vaticano contra el miedo al diferente, que lleva a los hombres a juntarse solo con los similares y puede derivar en el nacimiento de sectas.
“Hoy en el mundo, las desarmonías se han convertido en verdaderas divisiones: están los que tienen demasiado y los que no tienen nada, los que buscan vivir cien años y los que no pueden nacer. En la era de la tecnología estamos distanciados: más ‘social’ pero menos sociales”, lamentó el papa, durante la festividad de Pentecostés, celebrada en la Plaza de San Pedro del Vaticano.
“Siempre existe la tentación de construir ‘nidos’: de reunirse en torno al propio grupo, a las propias preferencias, el igual con el igual, alérgicos a cualquier contaminación. Del nido a la secta, el paso es corto”, añadió.
El papa presidió esta celebración en la que los católicos conmemoran la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles y en su homilía defendió la necesidad de que los hombres encuentren la paz y la armonía, para que sientan tranquilidad “aun cuando la superficie esté agitada por las olas”.
Criticó que “las prisas que nos impone nuestro tiempo” marginan la armonía y provocan que las personas corran, “movidos por un continuo nerviosismo” que les hace “reaccionar mal a todo”.