Llegan la vacaciones escolares y a veces ese tiempo libre de los niños se altera la cotidianidad familiar, entonces surge la pregunta qué hago con mis hijos.
En palabras del psicólogo clínico infantil Carlos Viscuña, el asunto no es tanto qué hacer sino la orientación de los adultos a propósito de las vacaciones y cómo éstas deben entenderse. Es muy común, que los padres deduzcan que hay que ocupar “el muchachito” sobre todo si ese lapso de descanso escolar no coincide con el de papa y mamá, y no tienen quien se los cuide.
El caso es, que existe un tiempo libre, mal llamado tiempo de ocio, en que el niño no va a la escuela cotidiana. Ahora, cómo hacer para que las vacaciones sigan siendo de manera natural un tiempo y un espacio para el aprendizaje, porque el desarrollo madurativo ni la inteligencia ni tampoco el aprendizaje están de vacaciones, acota Acuña.
Entonces, cuando no se entiende así, es muy común que los padres se debatan en esa postura dicotómica sobre qué hacer, no hacer, es bueno, es malo, lo vigilo o no lo vigilo, lo dejo solo, está en peligro si está todo el día en la casa.
Ello, porque tienen menos argumentos para objetar el uso de la tablet o el teléfono por tiempo prolongado, ya que el niño no tiene que estudiar, o levantarse temprano, reflexiona.
En ese contexto, prela mucho los estilos de vida y de crianza y cómo es la vida del niño cotidianamente esté o no de vacaciones y el tiempo de compartir con los padres.
Con ese propósito, existen diferentes actividades, momentos y sitios, como salir a caminar, montar bicicleta en el parque, compartir una lectura diaria en casa, leer un cuento, noches de familia, jugar ludo, monopolio. Es fundamental esa interacción social, resalta el psicólogo.
Refirió que hasta hace poco se culpaba a la pandemia estábamos todo el día en la casa y se agotaba la paciencia. Actualmente, que de alguna manera se ha flexibilizado la situación es qué hago con “el muchachito”.
Sigue siendo una postura muy dicotómica de los padres a propósito d el derecho de los niños a la recreación y al desarrollo del aprendizaje de manera natural más allá de la escuela, expone el psicólogo.