(EFE).- Un terremoto, de 5,1 grados, sacudió por tercera vez este lunes el oeste de Afganistán, precedido de uno de 4,9 y otro de 4,7, en la misma región en medio de las operaciones de rescate de víctimas tras los seísmos que devastaron la zona el pasado sábado, con más de 2.400 muertos y unos 2.00 heridos.
El sismo de 5,1 de magnitud y de 10 kilómetros de profundidad se reportó a 37 kilómetros al noroeste de la ciudad de Herat, situada en el oeste de Afganistán, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, en inglés).
Hasta el momento no se han informado de daños.
El epicentro del último, y más intenso, de los tres terremotos registrados hoy con solo unas horas de diferencia, tuvo lugar a unos cuantos kilómetros del distrito de Zindah Jan, también en Herat, epicentro el pasado sábado de una serie de sismos que devastaron una docena de poblados.
Esto mientras centenares de voluntarios buscan, con palas e incluso a mano, supervivientes o los cuerpos sin vida de los desaparecidos tras la serie de terremotos y réplicas de hasta 6,3 de magnitud que sacudieron esta misma provincia el pasado sábado.
El primero y el cuarto, los de mayor magnitud, fueron de 6,3 grados y se produjeron en el distrito de Zindah Jan, de Herat, según el USGS.
El país está desbordado con hospitales saturados y sin recursos suficientes para atender a las víctimas, a la espera de que las naciones y organismos internacionales respondan al llamado de la emergencia.
La catástrofe del sábado es uno de los peores y más mortíferos seísmos registrados en el país en las últimas décadas.
Foto: EFE