La espera terminó, y después de varios meses de preparación, la novena de los Cardenales de Lara ya tiene a sus soberanas, quienes los acompañarán en cada juego de local en el parque Don Antonio Herrera Gutiérrez de Barquisimeto, ellas son Liliana Castro como la gran soberana, junto a Iliana Amaro en la categoría pre-juvenil y Valeska Salik en infantil.
Los presentes en la edición 23 de esta gala pudieron disfrutar del ritmo urbano y electrónico con los chicos de Over Fligh y al poco tiempo se incorporaban las mascotas de Cardenales de Lara, el Guarito y Guarita en las movidas coreografías.
Por su parte, el presidente de la organización Madrina de Cardenales de Lara, Angelo Bertel destacó que este certamen enaltecen la belleza con inteligencia y educación, por lo que las candidatas recibieron más de 20 talleres de formación integral. Recordó que no dependen de un prototipo, ni limitaciones en tallas sino que triunfa la inclusión, seguridad de la mujer y en esta oportunidad dejan de enumerar los primeros lugares, en honor al talento de todas las participantes.
La animación estuvo a cargo de Gregorio Valles y Carolina Navarro, quienes se mostraban con naturalidad y animaban las fanfarrias con las candidatas favoritas. Una emoción que crecía al ver a las 23 aspirantes.
El desfile de traje de baño en rojo y blanco con un brazo al descubierto abrió con las seis candidatas en la categoría infantil, luego las ocho de pre juvenil y finalmente las nueve en juvenil contaron con el dinamismo y energía de los bailarines de la academia Over Fligh.
Mientras que la pasarela en traje de gala tuvo el fondo musical del repertorio instrumental del ensamble Pentagrama larense, en ese desfile Daniela Linarez y Danielys Loyo se llevaron banda lPrincesa Glamour en la categoría infantil y prejuvenil respectivamente.
Angely Torrealba, la madrina de la temporada anterior entregó la corona a la nueva soberana, y deslumbró con su vestido plateado tallado con pedrería y cola rosada en su última soberana como madrina de los pájaros rojos.
Foto: cortesía Luis Vargas