Sin respuesta concreta alguna amanecieron este lunes 10 de enero los alrededor de 4000 buhoneros –o comerciantes informales— que fueron desalojados el pasado lunes 3 de enero del casco central de la ciudad de Barquisimeto.
Tal como ya lo señalara este portal informativo, el referido desalojo fue denunciado por un grupo de alrededor de 30 de esos trabajadores, que, a tales efectos, se acercaron hasta nuestras oficinas de redacción.
En esa oportunidad, destacaron los denunciantes que, para ellos, tal circunstancia representaba –y sigue representando– una situación de extrema gravedad, por la sencilla razón de que –recalcaron— de allí, de ese trabajo de la economía informal, es que ellos derivan el sustento para sus respectivas familias.
En horas de la noche de este domingo 9 de enero, en conversación con Mileydis Barradas, una de las trabajadoras afectadas, ésta manifestó que, hasta ahora, no han recibido una respuesta concreta de parte de la Alcaldía del Municipio Iribarren acerca de qué es lo que por fin va a pasar con ellos.
Destacó que, el pasado viernes, una representación buhoneril estuvo reunida con altos representantes de la División de Mercados de la citada alcaldía capitalina, pero que allí no se llegó a ningún acuerdo.
Y no se llegó a ningún acuerdo, precisó, debido a que lo que les ofrecían era simplemente que se ubicaran en un solar abandonado del casco de la ciudad.
Expresó que, como consecuencia de ello, los comerciantes informales desalojados se apersonarán nuevamente este lunes, desde muy tempranas horas de la mañana, a las puertas del Palacio Municipal de Iribarren, en la carrera 17, frente a la Plaza Bolívar, en busca de una respuesta concreta.
Y recalcó que lo que ellos aspiran es a una reunión directamente con el alcalde iribarrense, Luis Jonás Reyes Flores, “porque él es el único que puede darle solución a esta crítica situación que ahora se nos está presentando”.
Reinaldo Gómez