Todo indica que la tendencia se está revirtiendo, de miles de venezolanos que huían de las crisis económicas que azotó a Venezuela entre los años 2015 y 2019, ahora cientos de ellos retornan, motivados a la sensación de la estabilidad del Bolívar, la alta circulación de dólares y la variedad de alimentos en los supermercados.
En un dato más exacto, la encuestadora Datanálisis, dice que el flujo migratorio ha disminuido desde el 2020 en un 60%. Mientras que el número de retornados ha aumentado, particularmente en las zonas de clase media que rodean el centro de Caracas.
Pero el retorno de connacionales desde otros países del sur y centro América también ha tenido otros matices, que responden a la pandemia, inflación, xenofobia y delincuencia.
Para nadie es un secreto, que la Venezuela de la hiperinflación, hambruna, y escasez del 2015, 2016, 2017, 2018, 2019 y 2020 no es ni la sombra de la Venezuela del último trimestre del 2021, donde todo lo anterior parece haberse revertido, a excepción de los cortes eléctricos.
Esa misma percepción tiene Lorena González, quien regresó a Cabudare, una ciudad cercana a la capital del estado Lara, proveniente de Perú.
Relata que las razones que la llevaron a emigrar en 2017, era la escasez de alimentos y el poco poder adquisitivo. Sin embargo, esa percepción cambió a principios de 2021, cuando regresó al país y se encontró con una economía muy diferente.
Dice también que uno de los mayores costos a los que se enfrentan los migrantes es al pago de alquiler y servicios, por lo cual, cuando llegas a tu país de origen sientes el ahorro.
Pero González también dice que varios de sus amigos también se han regresado, y ahora trabajan en la economía informal, donde pueden generan ingresos muy similares a lo que obtenían en Perú.
Por su parte, el economista Luis Vicente León dice que “Hay gente que vuelve, y eso está claro”.
Los venezolanos que emigraron encontraron empleo principalmente en tiendas minoristas, restaurantes y hoteles colombianos, precisamente las industrias más afectadas por los cierres iniciales de la pandemia, que pasado facturas a las economías del sur.
En Chile, la tasa de inflación anual se ha más que duplicado en los últimos dos años hasta el 7,8 % y en Brasil subió al 10,4%.
Xavier Díaz es otro venezolano que retornó a su país, dice que ver a su familia y amigos, era una necesidad. Durante su estadía en Medellín, solo trabajo para pagar el alquiler de la casa y la comida.
“Desde que llegué a Venezuela, he notado que el dólar no sube todos los días, como subía en 2018, cuando emigré”.
Fernando y Luisanny, ambos de 24 años, en declaraciones al diario El Clarín de Argentina, dijeron que después de tres años en Buenos Aires consideraron que ya no tenían nada más que hacer allá. Para ellos, la inflación, la subida del dólar y la inseguridad fueron los detonantes para devolverse a su tierra natal.
Por Anderson Piña Pereira
Fuente: El Comercio / Bloomberg