Jon Rahm no paró de escuchar que su destino era ganar este Masters de Augusta porque tantas estrellas españolas estaban alineadas a su favor y así ocurrió.
El domingo 9 de abril era la fecha de nacimiento de Severiano Ballesteros, su ídolo e inspiración en el golf desde temprana edad . Este año se cumple el 40mo aniversario del segundo título de Ballesteros en el Masters. Además, el caddie Adam Hayes recibió un overol con el número 40 — el 9 de abril.
“Me dijeron tantas cosas sobre porque este podría ser el año”, dijo Rahm, imponente con su nuevo chaleco verde de campeón. “Y yo traté de no darle demasiada importancia”.
Su golf resultó ser más valioso que cualquier otra coincidencia histórica.
Rahm convirtió el día más largo en su victoria más dulce, comenzando el domingo con un déficit de cuatro golpes en el frío de la mañana y terminando con la luz del sol poniente, al conquistar otro grande y consolidarse como número uno del mundo.
Se convirtió en el cuarto español que se consagra campeón del Masters, siguiendo los pasos de Ballesteros, José María Olazábal y Sergio García.
Rahm cerró con tarjeta de 69 golpes, tres bajo par, para tomar distancia de un errático Brooks Koepka. Superó por cuatro golpes sobre Koepka y Phil Mickelson, de 52 años, quien logró 65, la mejor marca del torneo. Es el subcampeón de mayor edad en la historia del Masters.
Fue Mickelson quien declaró que Rahm estaría entre las estrellas más grandes del golf incluso antes que el español se convirtiera en profesional en 2016. Rahm ahora tiene una chaqueta verde para acompañar su título del Abierto de Estados Unidos que conquistó en 2021 en Torrey Pines.
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