Las autoridades colombianas bloquearon los pasos ilegales sobre el río Táchira con la destrucción de puentes improvisados que conectaban las trochas entre el departamento Norte de Santander en Colombia y el estado Táchira en Venezuela, con el fin de controlar el cruce de transeúntes por los puentes internacionales de manera legal.
Un aproximado de 500 efectivos policiales de Cúcuta ejercieron controles de seguridad y cerraron pasos irregulares que ingresaban y salían diariamente del país.
El coronel José Luis Palomino, comandante de la Mecuc, informó a los ciudadanos que intentaban ingresar a territorio colombiano de manera ilegal, que ya no podrán cruzar por caminos informales y que deberán hacerlo por los puentes fronterizos de San Antonio y Ureña, abiertos para peatones. “Queremos desestimular la utilización de puentes informales y promover el cruce migratorio legal y organizado”, indicó.
Asimismo, enfatizó la importancia del Plan Frontera Segura, tranquila y humanitaria, que contempla estrategias como puestos de control, puntos de observación, patrullas de acompañamiento del Grupo Especial Migratorio (GEM) especializado en apoyo humanitario a lo largo y ancho de los 143 kilómetros de frontera del área metropolitana de Cúcuta.