Cientos de clientes de un banco chino se enfrentaron el domingo 10 de julio a la policía en un caso que ha llamado la atención por los intentos anteriores de utilizar una aplicación de seguimiento de Covid-19 para evitar que se movilicen.
Las personas portaban pancartas y corearon consignas en los amplios escalones de la entrada de una sucursal del Banco Central de China en la ciudad de Zhengzhou, en la provincia de Henan, a unos 620 kilómetros (380 millas) al suroeste de Beijing. Un video grabado por un manifestante muestra a los equipos de seguridad siendo atacados con botellas de agua y otros objetos mientras cargan contra la multitud. Dicha ciudad es una de la cual se han registrado nuevos brotes del virus
Videos posteriores publicados en las redes sociales muestran a manifestantes que son empujados hacia delante y hacia abajo por equipos de seguridad vestidos con camisetas blancas o negras. No está claro cuántos fueron sometidos a este trato. Las llamadas telefónicas a la policía de la ciudad de Zhengzhou y de la provincia de Henan no obtuvieron respuesta el domingo.
Los manifestantes se encuentran entre los miles de clientes que abrieron cuentas en seis bancos rurales de Henan y la vecina provincia de Anhui que ofrecían altos rendimientos. Más tarde se dieron cuenta de que no podían retirar sus fondos después de que los medios de comunicación informaran de que el director de la empresa matriz de los bancos estaba prófugo y que era buscado por delitos financieros.
“Hemos venido hoy y queríamos recuperar nuestros ahorros, porque tengo personas mayores y niños en casa, y la imposibilidad de retirar los ahorros ha afectado gravemente a mi vida”, dijo una mujer de la provincia de Shandong, que solo dio su apellido, Zhang, por miedo a represalias.
Foto: AP