AP— La ex supermodelo y primera dama francesa Carla Bruni-Sarkozy fue acusada preliminarmente el martes de estar involucrada en presuntos esfuerzos para presionar a un testigo que acusó al ex presidente Nicolas Sarkozy de recibir financiamiento ilegal de campaña desde Libia.
Bruni-Sarkozy fue puesta bajo supervisión judicial el martes, lo que incluye la prohibición de contacto con todos los implicados en el proceso, con excepción de su marido, según un funcionario judicial que no está autorizado a ser identificado públicamente al hablar sobre una investigación en curso.
Los cargos preliminares contra Bruni-Sarkozy incluyen manipulación de testigos y participación en una asociación criminal con el fin de intentar cometer fraude con el fin de engañar a los magistrados que investigan a su marido bajo sospecha de recibir fondos ilegales durante su campaña electoral presidencial de 2007, dijo el funcionario.
El abogado de Bruni-Sarkozy no respondió a las solicitudes de comentarios. Tras ser interrogada por la policía en mayo, sus abogados dijeron que había proporcionado «aclaraciones y explicaciones útiles», pero no hicieron más comentarios.
El testigo involucrado, Ziad Takieddine, es central en las acusaciones de que Sarkozy recibió millones en pagos ilegales del régimen del entonces presidente libio Muammar Gadhafi.
Nicolas Sarkozy , presidente de Francia entre 2007 y 2012, ya fue condenado en otros dos procesos judiciales, pero en todos ellos ha negado rotundamente haber cometido algún delito.
En febrero, un tribunal de apelaciones de París confirmó el veredicto de culpabilidad contra el ex presidente por financiación ilegal de la campaña electoral en su fallida reelección de 2012. Sarkozy fue condenado a un año de prisión, de los cuales seis meses fueron suspendidos. Los abogados de Sarkozy han apelado ante el Tribunal de Casación, el tribunal más alto de Francia. Con la apelación pendiente, Sarkozy no puede ser encarcelado de acuerdo con la ley francesa.
Se le acusó de haber gastado casi el doble del máximo legal de 22,5 millones de euros (27,5 millones de dólares) en la campaña de reelección que perdió ante el socialista François Hollande.
En un caso separado en 2021, Sarkozy, de 69 años, fue declarado culpable de corrupción y tráfico de influencias.
Es el primer expresidente francés en la historia moderna condenado y sentenciado a prisión por acciones cometidas durante su mandato. Sarkozy se retiró de la política activa en 2017.
AC