ICOLT / Unos cuatro mil migrantes centroamericanos han reiniciado su caminata hacia EEUU. Desde este viernes y horas posteriores, caminan unos 2800 kms sobre suelo mexicano para llegar a la frontera entre ambas naciones. Querrán cruzarla para hacer realidad su “sueño americano”, pero el presidente Donald Trump está haciendo todo para evitarlo.
El gobierno de EEUU dispuso el viernes que las personas que ingresen ilegalmente al país ya no podrán solicitar asilo, en un intento por disuadir las caravanas de movilizados y de presionar a México a acciones, a juzgar por los hechos, opuestas a lo hecho hasta ahora.
«Debo tomar medidas inmediatas para proteger el interés nacional y mantener la efectividad del sistema de asilo para los solicitantes de asilo legítimos, que demuestren que han huido de la persecución y justifiquen los muchos beneficios especiales asociados», añadió Trump antes de partir a París.
En tanto, el 90% de los migrantes activó la marcha emprendida hace casi un mes. Otro poco se ha quedado descansando en la capital azteca donde han recibido atención. El gobierno de ese país ha dado incluso facilidades a quienes han decidido quedarse en ese país.
Pero muchos quieren seguir hacia EEUU, donde siguiendo orden de Trump, 5.000 soldados han sido enviados a la frontera para hacer frente a la llegada de los migrantes.
La próxima semana de noviembre podrían estar llegando los primeros. Esa será otra historia.