La enorme contracción que ha afectado a la industria dela construcción en todo el país, estimada en un 98 por ciento, ha dejado a alrededor de 1.200.000 trabajadores sin empleo, y, de ellos, unos 25.000 en el Estado Lara.
El anterior señalamiento provino de Pedro Peña, presidente del Sindicato Único de Trabajadores dela industria de la Construcción del Estado Lara (SUTICEL), Pedro Peña, al ser inquirido al respecto por EL INFORMADOR VENEZUELA.
–Eso de la reactivación de la economía del país, de la que tanto ha hablado el presidente de la república, Nicolás Maduro, no sé hasta qué punto será cierto, porque, al menos en la industria de la construcción, repito, todavía no se ha producido.
–Y, lamentablemente, según todos los indicadores económicos que nosotros manejamos, si es que esa recuperación se da, el de la construcción será el factor de la economía que más setardará en recuperarse.
¿Desde qué momento comenzó a percibirse esa grave crisis en la industria dela construcción?
–Esa contracción se inició máso menos en elaño 2015, y no ha sido posible, no tanto reactivarla, sino ni siquiera detenerla, porque, desde entonces, lo que se ha estado viendo es una que otra obra por aquí, y otra por allá, pero las obras macro, esdecir, las obras de envergadura, hace mucho tiempo ya que no se ven en el país, incluso, ni siquiera de partedel gobierno.
–De paso, los materiales de construcción que ahora están llegando al país provienen es de China, y son de muy mala calidad.
–Todo eso, aparejado a las desacertadas políticas económicas del gobierno, ha provocado que ese sector, que ha sido siempre el que más empleo generaba en Venezuela, esté casi paralizado por completo, pues las empresas que construían grandes obras se han ido del país.
–De paso, también han colapsado las empresas conexas, tales como las de asfalto, las eléctricas y lashidráulicas, por sólo mencionar algunas.
–Y, por si fuera poco, el gobierno, en lugar de reactivar las comisiones tripartitas paralograr acuerdos salariales consensuados, tal como lo ha venido planteando la Organización Internacional del Trabajo (OIT), todo el tiempo lo que hace es decretar esos caprichosos, inconsultos e injustos ajustes salariales, que no alcanzan para nada.
Reinaldo Gómez