“Se ha oído hablar de vacunar a los docentes, de medidas de bioseguridad, pero no he oído que alguien se pregunte si están los docentes preparados emocionalmente para recibir a los niños en las escuelas”, expresó Cidalia de Sousa, doctora en Ciencias de la Educación, ante el llamado a clases presenciales en octubre próximo, anunciado por el Gobierno nacional.
Los docentes que estaban preparados para enseñar de manera presencial ante la eventualidad sanitaria tuvieron que adecuarse a la nueva realidad nada fácil, debido a las limitaciontes tecnológicas y de servicio de electricidad e internet, dijo.
Aunado, los docentes viven una situación económica “delicada”. El sueldo no cubre sus necesidades básicas. Para sobrevivir, muchos de ellos, han tenido que dedicar tiempo a otras actividades que generen ingresos, explica de Sousa.
Al retornar a la presencialidad en medio de su situación emocional, ¿podrán entender que cada niño viene con una realidad muy diferente a la que tenían antes de la pandemia?, se pregunta De Sousa.
El docente está susceptible debido al estrés, ansiedad… Y las emociones se contagian, impactan en el comportamiento del estudiante.
La situación es complicada
La situación es complicada, dice Laura Igarra, presidenta del Colegio de Licenciados en Educación del estado Lara, estrés y ansiedad aquejan aquejan.
Hemos constatado que muchos docentes están desmotivados, enfermos, desnutridos o mal nutridos. El hecho, de no poder costear alimentos, vestidos y calzado para él y su familia, muchos de ellos se han sumido en depresión, añadió.
Armonizar el ambiente
De Sousa, considera que la situación debe ser tratado integralmente para armonizar el ambiente escolar. La educación como la salud es un problema de Estado.
Corresponde al Gobierno propicipar las mejores condiciones en función para garantizar una enseñanza de calidad. ¿Qué hacer al respecto?
Desarrolla campaña e impartir talleres
De Sousa considera que el Estado tiene un rol importante y el gobierno no está haciendo lo que corresponde. Para empezar, ya debería haber una campaña de motivación respecto al retorno a las clases presenciales.
Además, el cronograma académico debe incluir talleres para ofrecer las las herramientas tendentes a enriquecer la la saud emocional y mental del educador en todos los niveles educativos.
Insistió en que los niños y adolescentes vienen de un confinamiento y es posible que hay habido violencia, abusos, hambre…
@auritarosacastillo
Foto referencial El Informador Venezuela