El féretro con el cuerpo de Fernando Villavicencio, el candidato a la Presidencia de Ecuador que fue asesinado el pasado miércoles, salió en un carro fúnebre acompañado de la familia rumbo a un cementerio del norte de Quito donde será inhumado este mismo viernes.
El automóvil fúnebre partió de la funeraria donde en las últimas horas ha sido velado en la intimidad familiar de un reducido grupo de parientes y allegados, y en cuyas puertas se reunió en la mañana de este viernes una veintena de simpatizantes y familias a los que finalmente no se les ha permitido el acceso.
Villavicencio, un periodista y exasambleísta que se había constituido como un acérrimo enemigo del expresidente Rafael Correa (2007-2017), fue asesinado en la tarde del pasado miércoles, tiroteado por supuestos sicarios colombianos al salir de un mitin en un colegio del norte de Quito.
Pese al pedido de simpatizantes y de algunos familiares, que solicitaban acceder a la capilla ardiente, el velatorio de Villavicencio transcurrió íntegramente de manera privada, sin que el público pudiese acceder para darle el último adiós.
Si bien sus allegados habían planteado realizar un homenaje póstumo a Villavicencio en un centro de exposiciones de la capital ecuatoriana, finalmente el féretro se dirigió únicamente al cementerio, que desde primeras horas había programado la inhumación para la tarde de este viernes.
Antes de dirigirse al camposanto, dentro del tanatorio de la funeraria donde se veló el cuerpo hubo una ceremonia de carácter muy privado en la que estuvieron presentes los familiares.
Desde primera hora de la mañana hubo desavenencias entre los parientes de Villavicencio, pues algunos culparon a la esposa del fallecido, Verónica Sarauz, de no permitirles el acceso a la capilla ardiente.
En los exteriores del tanatorio también se generaron algunas situaciones de tensión entre los simpatizantes que buscaban ingresar, lo que llevó a que algunos de los policías que resguardaban el lugar lanzasen gas pimienta.
Villavicencio era uno de los ocho candidatos inscritos para suceder al actual presidente, el conservador Guillermo Lasso, en las elecciones generales extraordinarias convocadas para el próximo domingo 20 de agosto.
El atentado también dejó al menos nueve heridos, de los que cinco de ellos se encuentran estables en la Clínica de la Mujer, de acuerdo a un comunicado del centro médico donde también llegó Villavicencio «en condición fulminante» y donde no lograron salvarle la vida.
Por su parte, las autoridades ecuatorianas han detenido a seis personas -todas ellas colombianas- como sospechosas de ser autores materiales del crimen, que se encuentran en prisión preventiva por orden judicial, pero aún se desconoce quién puede haber ordenado el asesinato.
De acuerdo con las mismas autoridades, también era colombiano un séptimo hombre que falleció después de quedar herido durante el intercambio de disparos que sostuvieron los atacantes con el personal de seguridad que resguardaba a Villavicencio.
Fuente: EFE