Al tenor de las pasión política las medidas de prevención del SARS-CoV-2 pasó a segundo plano, tal como se evidenció durante el simulacro electoral, desarrollado este domingo 10 de octubre.
Ello sucede, pese al exhorto de la Academia Nacional de Medicina de Venezuela en función de preservar la salud colectiva.
Sin embargo, la afluencia de electores se desbordó debido a los pocos centros habilitados –apenas tres en el municipio Iribarren, para el ensayo del voto, a propósito de las megaelecciones el próximo 21 de noviembre.
Y se evidenció en la Escuela Básica Libertador, situada en el barrio Bolívar, al oeste de la ciudad, en donde a la entrada del plantel funcionarios de la GNB y del CNE rociaban antibacterial en las manos de los votantes y en un primer momento se observó distanciamiento físico.
Sin embargo, esa distancia pertinente que demanda la crisis sanitaria actual por la covid-19 se rompió, a media mañana, cuando UBCH llegaron simultáneamente y se formó una aglomeración de personas.
Con la llegada de los candidatos a la Gobernación y la Alcaldía de Iribarren, Henri Falcón Fuentes y Luis Jonás Reyes Flores, respectivamente, sus seguidores, incluso con el uso incorrecto de la mascarillas, se agolparon alrededor de ambos.
Por cierto, llamó la atención la poca iluminación del salón en donde ambos aspirantes hicieron el ejercicio del voto. De cuatro lámparas fluorecentes no funciona ninguno y solo había un bombillo improvisado.
Campaña de manera responsable
Huniades Urbina, secretario de la Academia Nacional de Medicina (ANM), exhortó, el pasado 27 de julio, a los candidatos a desaerrolar sus campañas electorales responsabilidad “y no como estamos viendo actualmente”, dijo.
Resaltó que la pandemia aún no está controlada y mucho menos en Venezuela donde se reportan a diario unos 1.400 casos, según datos oficiales, dijo.
Advirtió que tales comportamientos puede repercutir en el aumento exponencial de la covid-19 más con la cepa delta que es altamente contagiosa y puede evolucionar rápidamente hacia casos graves.