La Liga Árabe dio este domingo la bienvenida a un alto el fuego entre el Ejército Nacional Libio (LNA) y el Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA) propuesto por Turquía y Rusia, que entró en vigor la madrugada de este domingo, tras la intensificación de los combates en varios puntos de Libia.
En declaraciones a la prensa en su sede de El Cairo, un representante del organismo panárabe pidió a todas las partes libias que acaten el cese de las hostilidades y la distensión, y que muestren su “buena intención respecto a los esfuerzos realizados para reanudar la vía política” para resolver el conflicto.
El mariscal Jalifa Hafter, comandante del LNA y hombre fuerte del este de Libia, aceptó ayer el alto el fuego propuesto por Turquía (valedora del GNA) y Rusia, que respalda al militar.
El líder del Gobierno reconocido por la ONU, Fayez al Serraj, puso ayer como condición para llegar a una tregua que Hafter retire las tropas que asedian Trípoli desde hace meses y dio la bienvenida “a las iniciativas de Rusia y Turquía para declarar el alto el fuego”.