El amor tiene tantas variantes como formas de ver el mundo, y eso lo hace tan complejo y hermoso a la vez.
Te propongo que traigas a tu mente, un amor que no pudo hacerse realidad. De esos que llaman platónicos. Se manifiestan como una necesidad de tener lo ideal sin ser reales.
Ese amor que nació en tu imaginación, donde era perfecto como una película, tanto así, que lo sentías verdadero, pero estaba destinado a ser sólo eso: una fantasía, una ilusión. Sin embargo, fue tu primer encuentro con el amor.
Es súper común en la infancia ilusionarse con alguna persona sin interés alguno de por medio, ni siquiera físico. No obstante, los amores platónicos también pueden surgir en otras etapas de la vida.
Y más aún, no todos resultan ser una fantasía. Puedes enamorarte de un compañero(a) del colegio, de tu mejor amiga(o), un vecino(a), y existe la probabilidad de que ese amor se consume en una relación, contra todo pronóstico.
“No se puede renunciar a aquello en lo que no dejas de pensar todos los días” Paulo Cohelo.
¿De dónde viene eso de… amor platónico?
“Socialmente”, el amor platónico se refiere a un amor inconquistable, que por ciertos motivos no pueden materializarse.
Pero la concepción del filósofo griego, Platón, tiene un concepto muy distinto. Él consideraba que el amor es el impulso que nos lleva a conocer y contemplar la belleza en sí, es decir, la admiración por el otro es un aspecto fundamental va más allá de la apariencia física.
En resumidas, un amor platónico no tiene que ver en sí con un amor inalcanzable o imposible. Tiene que ver con un amor que trasciende las fronteras de la belleza física, siendo tal vez eso lo difícil de
alcanzar.
“El amor es sentir que el ser sagrado late dentro del ser querido” Platón.
Psicológicamente hablando
En conversación con la psicóloga Neydian Pastran, ella explica que los amores platónicos “están más allá del atractivo físico. Es más una unión mental que algo ligado al cuerpo”.
“Implican para una persona, esperanza e ilusión perpetua, ya que el individuo no desiste nunca de su convicción de que algún día conseguirá estar al lado de la persona amada”.
Aclara también que una persona puede tener varios amores platónicos a lo largo de su vida, o casarse y tener una relación normal, teniendo una fijación “platónica” por una persona inalcanzable.
En el mundo del espectáculo
Todos podemos tener amores platónicos, y suele ocurrir que son cantantes, actores u otro tipo de artistas del show bussines, quizás por la posición de “famoso” o por el simplemente hecho de querer “llamar la atención”.
Muchos lo confiesan luego de muchos años, como el cantante Romeo Santos, quien reveló a través de su cuenta de Instagram que la famosa cantante dominicana Miriam Cruz, vocalista de la agrupación “las chicas del can”, fue su amor platónico durante su infancia.
¿Se imaginan a Romeo colgando fotos de la cantante en su cuarto e imaginando -tal vez- una vida junto a ella? Quizás nunca pensó tener la oportunidad de decírselo, y vivió con la ilusión, al igual que muchas personas cotidianas lo hacen con él u otro famoso.
El intérprete venezolano, Oscarcito, también compartió una historia parecida en su cuenta de Instagram, donde sin temor a Dios le expresó su amor y admiración a la candidata al Miss Venezuela, Jousy Chan, alegando que aunque tenga novio o no pueda responderle ahora, él estará esperándola.
En lo cotidiano
Paola, de 18 años, delira por el cantante Maluma, mientras que Ángela con sólo nueve años, imagina poder abrazar a Rafa Arrieta, influencer y youtuber larense.
El periodista Reinaldo Gómez, a sus 78 años de edad, cuenta con amplísimo humor que perdió “la cuenta de las veces” que tuvo un amor platónico.
¡Ojo! no Todos resultan “inalcanzables”, ya lo dijimos. Hay personas cuyo amor platónico se convierte en realidad. Es el caso de Luz Pulido, quien en primer año soñaba con un chico de 5to, quien años después terminó siendo su pareja.
Por otro lado, Isis Cedeño se enamoró de su vecino y cuando este se interesó en ella, se dio cuenta de que no era lo que ella había imaginado durante mucho tiempo.
La lista de testimonios platónicos puede ser interminable. Al revisarla, muchos entienden que allí no figura su primer encuentro con el amor; otros descubren que sí. En todo caso, en lo que prácticamente todos coinciden, es que el amor real va más allá de contemplar la apariencia física, y busca admirar a esa persona especial, como pensaba Platón.
Todos tenemos un amor imposible que anhelamos, uno tormentoso que disfrutamos y uno inolvidable que negamos.
Historias reales
Estos testimonios te resultarán familiares. Incluso, quizá te identifiques con alguno de ellos. En cualquier caso, ¡comparte tu experiencia!
María Vielma
Fotos: @pixabay
Les recomiendo leer la novela Damatania una Lluvia en el Alma. Es un romance muy bonito