Tertulias de Café/ Maximiliano Pérez < El Informador Venezuela
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Tertulias de Café/ Maximiliano Pérez

DESAYUNO FORO FECHA 10/05/2017 FOTO DANIEL ARRIETA

           Somos Andinos Y…Con Café

 

Los andinos somos del talante de los retos que emprendemos, y digo somos porque, tengo entendido que muchos desconocen que numerosos larenses somos andinos.

Barquisimeto y Cabudare están asentados en el piedemonte andino, Terepaima, es el Alfa y el Omega de la Cordillera de los Andes y allí, don Eduardo Hernández, “El Rey del Café”, poseía grandes extensiones sembradas de la noble cereza que cambió el mundo. Como dice Mark Pendergrast.

La cultura agrícola del café se estableció hace doscientos cincuenta años en los Andes, sus promotores Gervasio Rubio y Francisco Labastida, sembraron un sueño posible en las esparcidas cordilleras, el atreverse a llevar un cultivo desconocido a lugares recónditos,  la atención de las nuevas siembras  las orientaron a nuevos espacios territoriales, lo más agrestes, lugares inhóspitos ubicados por nuevos caminos de trochas zigzagueantes trazados en cuestas interminables montaña arriba, la siembra del café solo  fue paralizada  por la enorme confrontación durante más de un década de la guerra civil  por  la Emancipación  e Independencia de la Patria, guerra que destrozo la débil estructura agraria del cacao y la ganadería de la Venezuela colonial , diezmando y empobreciendo aún más sus poblaciones, la nueva esperanza continuo en el florecimiento de la República de Venezuela a partir de 1830 fue la siembra del café, la asumieron los andinos y todos los pueblos de montaña durante el siglo XIX .

Los Andinos desarrollaron una propuesta innovadora, el sembrar los cafetales en una relación amigable con la naturaleza, una relación equilibrada de suelos, agua, planta , sembraron los cafetos a las  sombras de los frondosos árboles, terrenos escarpados  de grandes dificultades topográficas con las bondades de un clima eterno de primavera, laderas, zanjones, vegas, lomas, jornadas agotadoras que requieren un gran esfuerzo físico, la atención de las plantaciones  de café son realizadas artesanalmente, el gran acierto fue la integración de siembra de los cafetales de la variedades arábicos dentro de los bosques, actividad agraria integral, conservacionista entre el hombre, el ambiente y planta.

Con un millón de hectáreas durante todo el siglo XIX, Venezuela se trasformó en el segundo país exportador mundial de café, en la década de 1880 los registros de volúmenes de exportación salidos de la aduana de Maracaibo, rumbo a Alemania, Estados Unidos, Francia referidos por la Dra. Carolina Banko en trabajo de investigación la dinámica del Comercio Exterior venezolano siglo XIX; registran un monto de diez millones de dólares en oro. El espacio de los cafetales ocupando los territorios de montañas, laderas, lomas y vegas de las serranías andinas, conformaron un excepcional desarrollo vegetal una franja verde desde los 500 hasta los 1800 metros sobre el nivel del mar, siembras escalatorias durante más de medio siglo con los mejores cafetales adaptados, logrando una gran superficie anualmente, una inmensa fortuna.

En la Primera Exposición Universal celebrada en 1889 en la ciudad de Paris, para conmemorar los cien años de la Revolución Francesa, el café descerezado venezolano obtuvo el mayor reconocimiento, la medalla de oro al mejor café del mundo, otorgada a la “Finca Cobalonga,” propiedad de los hermanos Castillo, ubicada en San Casimiro, Estado Aragua. Casuísticamente los genes cafeteros heredados de mi abuelo don Blas Pérez Giménez y de mi tío Maximiliano Pérez Giménez hacen que el café se afiance en mi existir porque, ahora me entero que los Hermanos Castillo están emparentados conmigo a través de mi señora, Nancy Laclé Giménez, prima política de María Claudia Castillo, hija de don José Antonio Castillo, bisnieta y sobrina de los hermanos Castillo; al igual que sucede con don Eduardo Hernández, bisabuelo de Nancy.

El café también trajo el ferrocarril como sistema de transporte en la últimas dos décadas del siglo XIX. Venezuela construyó primero sus ferrocarriles mucho antes que las grandes regiones de los Estados Unidos, naciones europeas o países de Suramérica como Argentina y Brasil, se construyeron en tres años doscientos cincuenta y dos kilómetros de vías férreas mediante concesiones otorgadas a empresas de capitales privados foráneos y criollos que se asociaran en la construcción de tres vías férreas. En Trujillo el ferrocarril La Ceiba. Motatán 86 kilómetros, el gran ferrocarril del Táchira 109 kilómetros desde el puerto fluvial de Encontrados hasta la población de la Fría y el ferrocarril del Santa Bárbara El Vigía- de 60 kilómetros, toda la red ferrocarrilera era para el trasporte del verdadero grano de oro vegetal.

El mayor esplendor de la producción del café de la región andina es en el último cuarto del siglo XIX, los gobiernos  de periodo del Liberalismo Amarillo iniciados por Guzmán Blanco, la historiadora Dra. Catalina Banko, en su investigación La Dinámica del Comercio Exterior Venezolano siglo XIX, nos refiere que Maracaibo se convierte en la primera plaza exportadora de café, durante el periodo desde 1870 hasta 1897 los promedios del valor anual de las exportaciones de café eran de diez millones de dólares, una inmensa fortuna…

Fuente: Prof. Alirio Rangel Díaz.

CONTINUARÁ…

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