José Luis Pérez se deja alcanzar por la ametralladora de recuerdos que todavía viven en el manantial perenne de su memoria, entre la práctica ejemplarizante y apasionada del boxeo, la cual le otorgó el honroso calificativo de “Hijo Ilustre del Distrito Palavecino”; por parte del ayuntamiento local.
Para aquellos años, política y administrativamente era considerado el actual municipio Palavecino como Distrito. Eran los tiempos en que aquella localidad dejaba atrás su ruralidad para insertarse en los componentes progresivos de una modernidad.
Tildado de bajo en estatura, trato de aplicarse en disciplinas como el beisbol, natación; entre otras prácticas que solían aprenderse en el viejo CVN o conocido más tarde como INAM. Pero el espíritu de su grandeza inquebrantable lo condujo a perseverar en el boxeo.
Campeonatos y anécdotas
Comienza su carrera boxística en 1983 en el recordado gimnasio de la Urbanización Fortunato Orellana al mando del entrenador Carlos Gil, quién fervientemente lo incitaba a seguir su carrera por el deporte de contacto.
Experimenta su primera pelea en el popular torneo de boxeo contra José Marchan, contienda celebrada en el Francisco Arévalo. Surge ganador, y de allí comienza un periplo por torneos estadales, luego en los Juegos regionales donde se titula campeón, después pasa a los Juegos Juveniles en el edo. Falcón.
Con gracia evoca los Juegos” Batalla de Carabobo” trasmitidos por la televisora Venevisión; pelea difundida en la pantalla contra el representante de Argentina en peso Wélter junior; donde es visto por unos vecinos que sorpresivamente le avisan a su madre quién jocosamente manifestó: “ese nació para andar dando golpes”. Categoría donde logro su victoria.
Rudo golpe y brinco al ring
Prosigue su constante entrenamiento conquistando una medalla de bronce, pero al tratar de alcanzar la presea de plata, un fuerte golpe en un brazo lo saca del ring, quedando inmovilizado por un período.
El deber por la patria lo invita a cumplir con el servicio militar en 1985, en la Base Aérea Libertador de Maracay. Estando allí, se topa con el renombrado profesor Nerio Bravo; esté a pesar de estar consciente de la dolencias en su brazo derecho, lo obliga a entrenar hasta llevarlo en representación de Aragua a un regional en Valencia, donde en una titánica pelea logra doblegar a Ramón Gil; titulado medalla de bronce en 1983.
A pesar de ser guaro de nacimiento y convicción, le tocó nuevamente estar por obligación de su alistamiento militar en Maracay, representar al Estado Aragua en los Juegos zonales de Margarita donde se le apodo “el Tanquecito de Aragua”; cuestión que no era de su mayor agrado.
Definido como peso ligero, va de viaje por orden de su superior coronel Eleazar Castillo a República Dominicana en el campeonato “Compa la Romana”; dónde en apenas cinco días seguidos adquiere una victoria contra el favorito local, a pesar de su contextura.
Otras latitudes y combates
El boxeo lo lleva a cosechar una hoja brillante de 83 peleas ganadas, 32 perdidas; con un cúmulo total de 120 confrontaciones, estando presente en Juegos Panamericanos, Centroamericanos y en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988. Así también en los Juegos Confraternidad de Moscú 1985.
Visita países como República Dominicana, México, Canadá, Yugoslavia, Cuba, Puerto Rico, Francia, Rusia, Estados Unidos, Alemania y Corea del Sur; los cuales le permitió conocer y fotografiarse con gente del mundo deportivo y artístico, caso de: Ray Sugar Leonard, Muhammad Ali, Carl Lewis, Pipino Cuevas, Ben Johnson, Julio Iglesias; entre otras grandes personalidades.
Esteban Araujo su gran apoyo
Del perseverante entrenador Esteban Araujo relata con gratitud sus innumerables enseñanzas y apoyo económico en los distintos eventos, siempre propiciando el buen ánimo y estimulo, una vez que retorno del cuartel y es seleccionado para representar Lara y a Palavecino, su terruño de vida.
En el plano del resguardo ambiental
Para los años 2004- 2005 logra insertarse en la nómina de Inparques, asumiendo responsabilidades que irían proporcionando conocimientos y el indispensable compromiso con el entorno natural que inspira el trabajar en un punto tan cautivador cómo lo es el Parque Nacional Terepaima, vivencia que le ha permitido profesionalizarse y transformarse en un amante del ambiente y su entorno.
Por José Luis Sotillo J.
Cronista parroquial de Agua Viva
@aguavivajose