Durante su visita de Estado a Italia, el Rey Felipe VI sorprendió a diputados y senadores italianos al abrir su discurso en italiano, haciendo un guiño emotivo a su padre, el Rey emérito Juan Carlos I.
«No he nacido en Roma, como lo hizo mi padre, pero permítanme intentar decir unas palabras en la bella lengua italiana«, afirmó el monarca en un gesto que le valió un caluroso aplauso de los parlamentarios presentes. Felipe VI destacó así el vínculo familiar que une a la Casa Real española con Italia, aludiendo al nacimiento de Don Juan Carlos en Roma en 1938, durante el exilio de sus padres, Don Juan y María de las Mercedes.
Un guiño familiar en un escenario significativo
La alusión del Rey Felipe a su padre tiene un significado especial, ya que las menciones públicas al Rey emérito han sido escasas desde que este fijó su residencia en Emiratos Árabes Unidos en 2020. Este gesto cobra mayor relevancia por haberse producido ante ambas cámaras del Parlamento italiano, un honor reservado a pocos dignatarios extranjeros.
Entre las figuras que han tenido este privilegio se encuentran el Papa Juan Pablo II y el propio Juan Carlos I, quien en 1998, junto a la Reina Sofía, también pronunció un discurso ante diputados y senadores italianos durante una visita de Estado.
El presidente de la Cámara de Diputados, Lorenzo Fontana, recordó este precedente durante la sesión, destacando la continuidad en la relación entre ambos países. Además, elogió el compromiso institucional de Felipe VI, recordando las palabras pronunciadas por el monarca durante su proclamación en 2014: «La Corona debe saber ganarse el aprecio, el respeto y la confianza de los ciudadanos.»
Fortaleciendo los lazos entre España e Italia
La visita de Estado, que Felipe VI realiza junto a la Reina Letizia, subraya la estrecha relación histórica, cultural y política entre España e Italia. Este tipo de encuentros buscan fortalecer las alianzas bilaterales, y el gesto del Rey al recordar su vínculo personal con el país anfitrión añade un matiz humano y simbólico al acercamiento institucional.
Con este discurso, Felipe VI reafirma su papel como representante de una monarquía moderna, capaz de tender puentes entre el pasado y el presente, y de fortalecer las relaciones internacionales a través de gestos que trascienden lo político.
Con información de europapress.es